El equipo de La casa de papel vuelve a reunirse en El embarcadero, una nueva serie original para Movistar+, que llega este viernes a la plataforma de televisión de Telefónica dispuesta a romper con los estereotipos de la ficción española, adentrándose en un terreno poco transitado como es el del thriller romántico.

El embarcadero, que consta de un total de ocho capítulos, gira alrededor del triángulo amoroso formado por un hombre, Óscar (interpretado por el actor Álvaro Morte, el profesor), enamorado de dos mujeres totalmente diferentes, su esposa Alejandra (Verónica Sánchez), cerebral y urbanita y su amante Verónica (Irene Arcos), visceral, libre y salvaje.

«Queríamos hacer algo completamente diferente a La casa de papel», cuenta Álex Pina, creador de la serie junto a Esther Martínez Lobato. «Explorar un tema tan manido como la infidelidad, que ya ha sido desarrollado a lo largo de tres siglos de literatura, y quitarle todo el peso de la culpa judeocristiana para buscar un camino nuevo de comprensión en el que no apareciera ni el sentimiento de la traición ni del engaño, liberándonos de los prejuicios». La serie cuenta con la participación de un aragonés, el director Álex Rodrigo.

Se trata de un viaje emocional, de autodescubrimiento, el que emprende el personaje de Alejandra cuando recibe la noticia de que su marido se ha suicidado y se entera de que mantenía una doble vida. A partir de ese momento, la narración funcionará a dos niveles. Por una parte, a través de flashbacks iremos conociendo los detalles de la relación entre Óscar y Verónica. Por otra, seguiremos a Alejandra en su camino de investigación para intentar entender y encontrar respuestas. «Nos interesaba poner el foco en dos mujeres de 40 años», continúa Esther Martínez Lobato. «Se hacen muchas historias iniciáticas, pero pocas que exploren la identidad y la sexualidad femenina a una determinada edad». En efecto, las mujeres son las verdaderas protagonistas de la serie. Alrededor de Alejandra y Verónica se crean dos universos paralelos, pero lo interesante es ir asistiendo al progresivo encuentro entre ambos mundos, y de qué manera la sororidad femenina se va imponiendo a lo largo de los episodios.

SENSUALIDAD / Una de las características fundamentales de la serie es la sensualidad que desprende. Al fin y al cabo, lo que intentan los personajes es reconectar con sus instintos, esos que se encuentran adormecidos en nuestras rutinas diarias. Por eso la naturaleza se convierte en el único escenario posible; en esta ocasión en los parajes de la Albufera de Valencia, donde tiene lugar la mayor parte de la acción. «El espacio resulta fundamental, es un elemento narrativo más», continúa Martínez Lobato. «Esos campos de arroz, esos espejos que los cubren, constituían un entorno muy poderoso que servían para trasmitir la necesidad que tienen los personajes de sentir de una manera más pura y primitiva».

Con El embarcadero, Movistar+ apuesta por un modelo diferente en el que prima la atmósfera, el magnetismo de las imágenes y por supuesto los personajes, en constante búsqueda de sí mismos en una aventura introspectiva en la que también late el misterio. También arriesgan a través de un elenco de intérpretes nada obvio, lleno de nuevos nombres.

Además de Álvaro Morte, la serie cuenta con una magnífica Verónica Sánchez, el talento de Irene Arcos y, junto a ellos estarán a Cecilia Roth, Roberto Enríquez, Miquel Fernández, Antonio Garrido o Marta Milans.