Tras un año sin levantar cabeza, TVE-1 consiguió el pasado fin de semana volver a ser la cadena más vista de España gracias a la fuerza mediática de una de las pocas joyas que le queda a su corona: los deportes de masas. La selección española de fútbol, el Mundial de motos, y, sobre todo, el nuevo fenómeno del tenis que ya es Rafael Nadal hicieron que la primera cadena pública arrasase el sábado y domingo con unos espectaculares índices de audiencia, que la han colocado a la cabeza del ranking en la primera semana de junio.

Del glorioso fin de semana de TVE-1 destaca, por encima de todo, la final de Roland Garros, en la que Nadal se confirmó como nueva estrella audiovisual, a la altura del piloto de F-1 Fernando Alonso. El joven tenista mantuvo ante el televisor durante casi cuatro horas a 4.714.000 espectadores, más del 40% de los que en esa franja horaria veía la tele.

MAS DE SEIS MILLONES

El punto culminante de esta retransmisión coincidió con la entrega de la Copa de Roland Garros (18.44 horas), cuando 6.370.000 espectadores (58,1% de share ) sintonizaban TVE-1.

Además de ganar Roland Garros, la audiencia de esta transmisión tuvo el plus añadido del impacto mediático de Nadal, tal como se puede comprobar con otras finales del torneo que han ganado jugadores españoles.

La guinda del domingo para TVE-1 fue el GP de Italia de motociclismo, un valor seguro por el buen papel de los pilotos españoles. Así, esta prueba del Mundial tuvo su momento álgido con la carrera de MotosGP, que, pese a la caída de Sete Gibernau, reunió a 2.430.000 espectadores (31,8% de cuota).

Y el sábado, el fútbol tampoco dejó en la estacada a la primera cadena. Pese al flojo partido que realizó la selección que entrena Luis Aragonés, el España-Lituania reunió a 4.866.000 incondicionales (40,3% de cuota), con una punta de audiencia, a las 23.07 horas de 6.245.000 espectadores (46,3% de share ).