--¿Qué sintió en su debut en Liga el domingo con el Madrid-Villarreal?

--Tuve mariposas en el estómago todo el día, pero el partido ayudó, porque fue trepidante. Quedé satisfecho.

--Pero ya había narrado los partidos del Atlético...

--Quizás te responsabilizas más porque la trascendencia de narrar al Madrid o al Barça no tiene comparación con ningún otro equipo.

--Ustedes sabían, desde que Paco González se fue de la SER, que Lama se iría con él, ¿verdad?

--Son cuestiones empresariales que no me competen: yo me dedico a trabajar. Todo parecía encaminado a que eso iba a pasar, pero yo la confirmación oficial la tuve el día que Lama rescindió su contrato con la SER. Tengo una gran relación de amistad con él. En los últimos meses, he sido prudente y he preguntado poco por sus decisiones personales.

--¿Considera una traición lo que ha hecho Lama?

--Para nada. En lo profesional cada uno tiene derecho a elegir dónde quiere estar.

--O sea, que reclama ese derecho si en el futuro cambia de cadena.

--No reclamo ningún derecho. Solo digo que cada uno elige su futuro profesional si tiene opción para ello.

--¿Le propuso González irse con él a la COPE?

--Permítame que no hable del pasado. Yo elegí. Y elegí quedarme en la SER. No me parece de buen gusto hablar públicamente de ofertas que se hacen de forma privada. Tengo contrato con la SER.

--¿Está de acuerdo con sus compañeros de la SER que han dicho que Lama es el mejor narrador de España?

--Es evidente: todos los grandes eventos los ha narrado él en la SER.

--¿Cómo vivió la fractura producida por la salida de González?

--Me lo tomé de una forma profesional, porque en cualquier empresa se producen cambios. Cuando un proyecto termina y has sido feliz es evidente que sientes pena.

--El último EGM demuestra que su marcha les ha hecho daño...

--El partido acaba de comenzar y los 90 minutos terminan el 30 de junio. Cuando acabe la temporada se podrá hacer una valoración mejor.

--A usted le nombraron redactor jefe cuando se fue González. ¿No le parece un regalo envenenado en estos momentos?

--Yo no me quedé en la SER por un cargo, sino por perseguir un sueño que tenía desde pequeño: narrar grandes eventos deportivos. Desde niño me enseñaron que los sueños hay que perseguirlos, y la SER me ha brindado esa oportunidad. Lo de ser redactor jefe es para mí insignificante. Sigo teniendo la misma relación con mis compañeros. Llevo 13 años aquí y esa relación no la va a cambiar ningún cargo.