--¿Se parece la actriz Lisa Edelstein a la doctora Cuddy?

--Yo visto de otra manera mucho más cómoda. Puedo disfrutar de la vida y divertirme más que ella. Además, no es que yo no sea controladora, pero ella es mucho más controladora. Se lo permiten, claro.

--Ella es una mujer joven que dirige un hospital. ¿Cree que la ambición profesional, sobre todo en la mujer, está mal vista?

--Creo que es algo cultural. Vivo a caballo entre Los Angeles y Nueva York, dos ciudades sofisticadas y con un nivel cultural elevado. Pero, claro, no en todas partes ocurre lo mismo. En cualquier caso, la ambición profesional no tiene nada que ver con el entusiasmo. La primera suele ser descarada y consiste en ir por ahí dando codazos a tus compañeros. Pero el entusiasmo es otra cosa. Es mucho mejor para trabajar.

--A usted, además de interpretar, le entusiasma componer música, escribir, pintar... ¿Alguna prioridad?

--Si me siento creativa con mi trabajo entonces no tengo tanta necesidad de hacer otras cosas. Reconozco que, ahora, lo que intento es ver mundo, viajar...

--¿Viajar? ¿Cómo puede si sus jornadas de trabajo son de 12 horas?

--Bueno, hago más cosas además de trabajar. Realmente, los productores de la serie son los propietarios de mi tiempo, pero trato de escaparme si veo que voy a tener un fin de semana libre. Aunque muchas veces he cogido un vuelo y lo he tenido que anular porque me llaman para trabajar. Nunca tengo claro cuánto voy a trabajar. En cualquier caso, tengo dos meses de descanso entre temporada y temporada.

--Ya va por la sexta temporada. ¿Le siguen sorprendiendo los guiones?

--Absolutamente. Es increíble lo que hacen los guionistas. Nos dan el texto solo un día antes y nos sentamos a leerlo. Me gusta mucho esa sensación de leerlo por primera vez entre todos, porque así siento lo mismo que siente el público cuando nos ve.

--Hugh Laurie se ha animado a dirigir un capítulo. ¿Lo haría?

--Fue divertido ser dirigida por él. Le admiro tanto como actor que disfruté mucho. Pero yo no he pensado en dirigir. Pienso más en la producción, en ideas para proyectos.

--¿Es House un hombre sexi?

--Por supuesto. Tiene unos ojos preciosos y una cara agradable. Es listo, audaz, oscuro, gracioso y siempre dice la verdad.

--Está amargado. Usted, en la vida real, ¿se enamoraría de alguien así?

--Absolutamente.

--¿Puede decirnos algo de cómo avanzará su relación?

--No lo sé. Sé lo que usted.

--¿Se imagina una serie desgajada de House solo con la doctora Cuddy?

--No sé si alguien vería una serie que tratara solo de la doctora Cuddy. Quizá no, ¿verdad? Pero lo que sí digo es que me encantó rodar el capítulo en el que yo era más protagonista.