--Hoy toca la segunda entrega de Salvados por la Iglesia. ¿Quién más ha de temer a El Follonero?

--La Eurocopa, los toros, la televisión... Buscamos tratar temas sagrados, que parecen intocables.

--¿Y el mundo del corazón?

--Si nos renuevan, seguro que lo haremos, porque es muy apetecible.

--Usted estaba primero detrás, luego asomó un poco ante la cámara y ahora tiene su propio programa. ¿Cómo lleva este protagonismo?

--Bien, porque todo me ha llegado por casualidad, desde que me hicieron una entrevista de trabajo, en la que ni siquiera mentí. Pese al canguelo, me cogieron para escribir humor sin tener experiencia.

--¿Recuerda lo primero que escribió al ficharle Andreu Buenafuente?

--Un falso pregón para Rosa Andreu en Falset Tarragona y lo que decía Palomino, que me encantaba.

--¿Cuándo surgió El Follonero?

--De figurante, en Set de nit un programa de TV-3. Se ideó para un actor que pidió 500.000 pesetas y me tocó a mí, que era barato; mejor dicho, gratis. Pero no soy actor y solo puedo decir ante la cámara lo que siento. Más adelante quiero hacer un programa sin dar la cara.

--De niño, ¿Jordi Evole apuntaba maneras de Follonero?

--Algo así. Era el típico chico que estaba en medio de todos los fregados. Pero de pequeño quería ser serio, como Mònica Terribas...

--¿Es usted un modelo a admirar por su libertad para expresarse?

--Creo que una vez la gente sabe que realmente soy un empleado, todos querrían ser esa persona que le dice a su jefe lo que le apetece.

--Dirán que todo está preparado...

--Pues no es así. A Buenafuente le he dicho auténticas barbaridades --preparadas por el equipo de guionistas, porque uno tiene ideas limitadas-- y él se ha sorprendido, porque siempre ha dicho que no quiere saber lo que le voy a soltar en el programa.

--El Terrat parece una factoría...

--Si hay las chicas Almodóvar , nosotros decimos que somos los chicos Buenafuente . Han pasado Albert Om, Santi Millán, incluso José Corbacho. Ahora estamos Berto y yo, los más jovencitos. Creo que Andreu tiene mucho olfato, porque llevar 15 años con el humor en televisión es muy difícil. Ha pasado por todas las fases: estuvo con Alfons Arús, Xavier Sardà y Mikimoto. Y aún sigue...

--¿Piensa que El Terrat tiene que enterrar ya a Chikilicuatre?

--El equipo lo creó como un divertimento y las cosas han ido surgiendo. Si no supiera la verdad y no conociese a Xavier Pons, el director de TVE, hasta yo me creería lo de la confabulación eurovisiva. Creo que todo es muy honrado y son los creadores quienes deben decidir el futuro del personaje. En manos de una productora menos hippy , quizá se habría explotado más al personaje.

--Le dio la guitarra de Chikilicuatre al Papa. ¿Le pidió su número?

--Se la quedó y alguien debe tocarla, pero no me dio su número. El Vaticano es complicado.

--¿Cuál ha sido el peor personaje que le ha tocado?

--Aquí, Manuel Pizarro, que no está acostumbrado a que le tosan. Y fuera, Hugo Chávez, que amenazó con echarme del palacio de Miraflores y pensé que me pegaban. Me preguntó que si así se hacía periodismo en España y le contesté que sí.

21.25 / LA SEXTA