El profesor de instituto zaragozano Julio Escartín ha vuelto con un sabor agridulce del concurso Pasapalabra (A-3, 20.00), a pesar de mantenerse cuatro programas y haber desbancado el primer día al histórico concursante, Manuel Romero, que se llevó un premio de 1.023.000 euros (unos 170 millones de pesetas). Y es que Escartín lamenta sus errores --"Sólo con una pregunta más que hubiese acertado habría seguido"--, y una decisión del jurado que, considera, le perjudicó. La polémica se emitió ayer en el concurso, aunque se grabó hace ya un mes, tiempo en el que Escartín ha intentado, sin éxito, que en el concurso reconociesen el error.

"La pregunta aludía a la definición, comenzando por la letra r, de alguien que está preso. El otro concursante contestó reo, pero la respuesta prevista debía ser recluso. Ante la duda, se paró el programa para que el jurado pudiera comprobar si eran conceptos sinónimos, y finalmente la dieron por válida", recuerda, Escartín, quien entonces no dio más importancia. "Me fiaba totalmente del jurado, ya que poco antes me habían hecho una corrección que entendí acertada: al acto de levantar una bandera contesté erguir, en lugar de enarbolar, cuando es la última palabra la que se refiere a alzar estandartes, mientras que la primera es extensiva a todo".

Pero ya en su casa consultó el diccionario y consideró que era un error del jurado: "Un recluso es el que ya cumple pena, pero un reo es un acusado o culpado que después puede salir absuelto y no ser encarcelado --define--, por lo que decidí pedir explicaciones al programa".

Pero ésta tampoco le convenció. "Como justificación me enviaron una fotocopia de un diccionario de sinónimos editado en Chile, cuando habitualmente las consultas, como sucedió con la respuesta de la bandera que no me dieron por válida, las realizan en la enciclopedia que el programa publicita" Planeta.

Pese a sus protestas, Escartín, que en total se embolsó 4.880 euros (unas 800.000 pesetas), no espera conseguir nada más. "Sé que con esto no gano nada, tan sólo dejar patente mi opinión ante una situación que considero injusta", concluye.

En A-3 se mantienen en sus trece: "Tenemos diferentes fuentes de consulta para Pasapalabra --explica un portavoz de la cadena--, porque así damos cabida a todo tipo de voces que no aparecen en el DRAE, como chapapote, que nadie duda que ya es del acervo popular". Es decir, Pasapalabra no es reo de un diccionario. ¿O es recluso?