Las campañas electorales son un calvario para las teles públicas. La obligación de emitir los espacios gratuitos de los partidos e informaciones de todos los candidatos en los informativos provocan la huida masiva de la audiencia. Pero las características de la última campaña electoral (la incertidumbre y la recuperación de los cara a cara) han otorgado un plus de interés que ha beneficiado a TVE-1. Tal como se vea en el gráfico, con respecto al mismo periodo del 2007, la primera cadena pública mejora las dos semanas de campaña. En el conjunto de España, la subida fue de una décima (211.000 personas más). El aumento se basó en los dos cara a cara Rajoy-Zapatero y en el especial del día de los comicios.