El actor murciano Ginés García Millán compagina desde hace 14 años el cine (Carmen ), el teatro (Hamlet, El rey Lear ) y la televisión (Herederos ). Esta noche protagoniza en TVE-1 Alta traición , un especial del exitoso serial de la cadena pública Amar en tiempos revueltos .

--¿Cómo es este especial de Amar en tiempos revueltos?

--Se grabó hace casi un año y gira en torno a lo que le ha pasado al personaje de Ana Otero (Paloma). Yo entro en una historia que le sucede a ella.

--Hábleme de su personaje.--Se llama Patrick Turner. Es una especie de James Bond de los años 50 que va siguiendo a Paloma, porque su marido era espía y ella tiene una información que le interesa.--¿Usted sigue Amar...?--La veo cuando voy a casa de mis padres, porque allí no se puede ver ni hablar de otra cosa.

--¿Usted sigue

--¿Y por qué cree que le engancha tanto a sus padres?--Creo que es una serie muy digna, que está muy bien hecha y muy bien interpretada. Además, es un periodo de nuestra historia que les interesa mucho porque lo vivieron.

--Es la primera serie española que se emite en castellano en Estados Unidos...--Es una gran noticia para todos los que hacemos televisión. Creo que se está haciendo muy buena televisión en estos momentos en España. Hay una pequeña industria que está dando trabajo a mucha gente y de la que salen productos de mucha calidad.

--¿Cree que nunca se habían hecho tan buenas series como en la actualidad?--Se vive un buen momento, pero la tradición de series españolas es maravillosa. Yo me crié viendo la tele y recuerdo Fortunata y Jacinta , Cañas y barro ... Eran series muy importantes y de una calidad increíble.

Fortunata y Jacinta Cañas y barro

--Esta semana hace doblete encarnando al expresidente Adolfo Suárez en Antena 3 TV.--Sí, ha sido muy enriquecedor interpretar a un personaje tan complejo e inabarcable. He intentado documentarme y buscar, entre renglón y renglón, la esencia o el alma del hombre. Comprender por qué tuvo esa osadía y esa valentía.

--Usted que lo ha estudiado, ¿cómo era aquel Adolfo Suárez como persona?--Era un hombre que creía profundamente en lo que hacía. Su valentía política le costó un desgaste emocional y familiar muy importante. Su vida es como una tragedia griega.

--¿Qué opinión tenía de él en aquellos años de la transición?--Suárez es un político que, por su carisma y por lo que representa, me caía y me cae bien. Pero siempre pensé, como mucha gente, que podía haber hecho más. Eran tiempos muy complejos, por lo que me parece un milagro todo lo que pasó.

--¿No se fue injusto con él?--Sí, lo creo. Pero eso nos pasa en este país y en otros muchos: no tenemos la distancia suficiente para ver las cosas claras cuando están pasando. Es verdad aquello de que el tiempo pone a cada uno en su sitio.

--¿Está satisfecho de su trabajo en el telefilme?--Sí. El director sabía muy bien qué hacer para que la historia interesara. No había que caer en un concurso de imitaciones, porque no hay otra imitación como la que hizo en su día Pedro Ruiz de Suárez. Aquí había que contar una historia de verdad.

--¿Se ve parecido físicamente al expresidente?--Alguna vez me habían dicho que me daba un aire, pero cuando me vi la primera vez peinado como él... Nos hemos reído mucho cuando estábamos caracterizados, sobre todo con el Rey (Fernando Cayo). Cuando grabamos en Avila la gente comentaba los parecidos.

--¿Le conmueve la enfermedad que padece hoy en día?--Sí. Una de las cosas más terribles es la pérdida de memoria, para ti y los tuyos. Lo sé porque lo he vivido con mi abuelo...

--¿Seguirá usted en