Bajo el techado de una antigua fábrica de encofrados de Navalcarnero, localidad situada a 30 kilómetros de Madrid, el elenco de actrices de la serie carcelaria Vis a vis combate estos días el frío con entusiasmo. Acaban de superar el ecuador de la tercera temporada, en la que hay secuencias grabadas bajo cero e inmersiones en piscinas heladas, pero el ambiente que se respira entre las presidiarias es el de un primer día de cole.

Veteranas y novatas se pellizcan para confirmar que no es un sueño: están dando vida a los nuevos capítulos de una de las series que mejor encarna la edad de oro de la ficción televisiva de este país.

La marea amarilla -denominación del inabarcable club de seguidores de Vis a vis- está de enhorabuena: lejos de desaparecer, su serie favorita se prepara para volver más grande, con más acción, en una cárcel remozada y con una decena de incorporaciones en el reparto.

NUEVO PENAL / El penal de Cruz del Sur que albergó las dos primeras temporadas (y que emitió Antena 3) da paso ahora a Cruz del Norte, una prisión más amplia pero respetuosa con la iconografía en tonos negros y amarillos de la anterior. «Es como otra serie, con una nueva cárcel en la que nuevos personajes vivirán nuevas historias, pero hemos sido fieles a nuestras señas de identidad», advierte Jesús Colmenar, director de la tercera temporada, que será emitida por la cadena de pago Fox, aunque aún sin fecha confirmada.

La nueva Vis a vis crece en coralidad y diversidad. A Najwa Nimri (Zulema), Maggie Civantos (Macarena), Alba Flores (Saray) y el resto de internas de temporadas anteriores se unen ahora una concejala corrupta (a quien dará vida la actriz Ruth Díaz), una funcionaria mexicana de gustos sádicos (Adriana Paz), una narcotraficante gallega (Ana Marzoa), una líder de la mafia china (Huichi Chiu) y una reclusa transexual (Abril Zamora), entre otras. La sección masculina también se renueva con la incorporación de Luis Callejo, que dará vida a un funcionario de prisiones, y Javier Lara, que será el psicólogo y director de la prisión.

En un encuentro mantenido con la prensa en el set de grabación, todos mantuvieron en secreto el argumento de los ocho episodios que compondrán la nueva temporada, aunque Daniel Pérez, director general de Fox España, admitió que serán «más oscuros, trepidantes y duros». Y también más cortos, ya que se acogerán a los 50 minutos habituales de las series internacionales.

El primer capítulo arranca con el traslado de las reclusas de Cruz del Sur a la nueva prisión. Ignoran que se dirigen a un presidio gobernado tras las rejas por la mafia china y en el que las viejas relaciones de poder entre los personajes han de rescribirse.

«Las tramas que quedaron abiertas al final de la segunda temporada continúan en ésta, pero habrá historias de amor más potentes, tramas más complicadas y las protagonistas se enfrentarán a un mundo desconocido para ellas», explica el director.

Las actrices comparten la sensación de habitar un nuevo ecosistema. «Más que crecer, Vis a vis ha dado un salto cualitativo», opina Berta Vázquez (Rizos).

«En esta temporada no dejamos títere con cabeza», añade Alba Flores, quien achaca la vuelta de la serie a la presión de los fans. «La marea amarilla no ha parado de preguntar por nuestro regreso ni un solo día», recuerda.

UNA SERIE INCÓMODA / Para los responsables de la producción, tras la tercera entrega de Vis a vis hay también razones creativas: «En tiempos de corrección política, hemos optado por renovar una serie incómoda que reivindica la imperfección», concluye el productor ejecutivo Iván Escobar.