Cuando el PP reformó el Código Penal para aprobar la prisión permanente revisable gozaba de mayoría absoluta en el Congreso de los Diputados (fue en la misma época en que dio luz verde a la Ley de Seguridad Ciudadana). Pero la misma fue contestada ya en aquel momento por un recurso de inconstitucionalidad por considerarse contraria al derecho de reinserción.