Con la norma aprobada ayer, Extremadura se convierte en la octava comunidad que regula las listas de espera, si bien sólo la extremeña y Castilla-La Mancha han optado por dar a su normativa carácter de ley, mientras que en el resto se trata de planes, decretos u órdenes. También es muy dispar tanto lo que se regula como los tiempos que se fijan.

Así, Andalucía se limita a fijar tiempos máximos (180 días) para las intervenciones quirúrgicas, mediante una orden. Por su parte, Aragón cuenta con un decreto que fija entre 30 y 180 días --según criterio de prioridad del especialista-- el plazo límite para las operaciones.

Mientras, Castilla-La Mancha dispone de una ley que, en este momento, establece demoras de 90 días para operaciones, quince para consultas y siete para pruebas diagnósticas.

En Navarra sólo se regulan los tiempos para intervenciones, que quedan fijados en 180 días, mientras que Castilla y León estableció en el 2003 un plan de choque vigente hasta el 2007, y que para este ejercicio marca tiempos de 150 días para operaciones, 45 para consultas y 25 para pruebas, que espera rebajar un 30% en dos años.

Madrid también cuenta con un plan, limitado a la lista de espera quirúrgica, cuyo objetivo es que este año ningún paciente espere más de un mes. Finalmente, Valencia ha iniciado este año un programa que busca que para el 2006 ningún paciente espere más de 45 días para operarse, diez días para ver al especialista y otros tantos para las pruebas.

Además, tres comunidades han especificado los fondos que destinarán a estas actuaciones. Serán 62 millones de euros en Castilla y León, 112 millones --la mitad de ellos para conciertos-- en Madrid y 123 millones en Valencia.

Nueve regiones no tienen, de momento, norma alguna.