Más de medio centenar de adolescentes extremeñas de entre 15 y 19 años sufren cada año embarazos no deseados. Según los últimos datos que maneja el Consejo Superior de Investigaciones Científicas, el 95% de ellas manifiestan no querer tener el hijo, pero sólo el 34% decide abortar. En este sentido, la tasa de abortos entre adolescentes en la región ha pasado del 7 al 34% en la última década, una situación que ha provocado que médicos, sindicatos y algunos partidos políticos reclamen una asignatura obligatoria sobre salud sexual.
Se trata de un problema creciente no sólo en Extremadura, sino en general en España, donde se registran 90.000 embarazos no deseados cada año, según las cifras que maneja el Ministerio de Sanidad y Consumo. En este sentido, entre 1999 y el 2004 se practicaron en Extremadura 5.282 Interrupciones Voluntarias del Embarazo (IVE), con un aumento medio de 125 casos por año. Además, un 45% de los abortos practicados en la región corresponden a menores de 24 años, y de ellos, casi un millar se han realizado a menores de 20 años.
