La suerte pasó lejos de Badajoz, donde la Lotería no quiso pararse aunque algunos estuvieron a punto de mirarla a la cara. El regente de Antigüedades Carpanely mostraba a sus contertulios en la cafetería plaza de España un décimo que bien podría haber sido uno de los ganadores del segundo premio, solo que llevaba un 6 en vez de un 4 para ser el 147 premiado. Tras verlo en la televisión , corrió a por su décimo, pero, por un número, no hubo suerte.
