Amalia García Mora, viuda del policía nacional extremeño Pablo Sánchez César, asesinado por ETA en septiembre de 1983, dejó claro ayer que está en contra de la política antiterrorista que está llevando a cabo el Gobierno de Rodríguez Zapatero, al tiempo que rechaza medidas como la concesión de la prisión atenuada para el terrorista Iñaki De Juana Chaos.

Tras mantener una reunión con el presidente de la Junta, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, "para cuestiones particulares", esta víctima de ETA señaló, a preguntas de los periodistas, que la situación política actual "está muy mal". Amalia no quiso valorar el proceso de negociación entre el Gobierno y ETA, aunque sí indicó que no le parece "acertada" la actual política antiterrorista. "Lo que quiero es que quiten el terrorismo y que no haya más muertos", apuntó.

En cuanto a la concesión de la prisión atenuada para De Juana Chaos, esta miembro de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) fue más contundente: "Que se hubiese muerto de hambre allí (en la cárcel), me daba igual". En esta línea, añadió: "No veo bien que le den la prisión atenuada, desde luego que no".

Y es que, a su juicio, en este caso el Gobierno central ha "cedido" a las pretensiones del etarra. La viuda de Pablo Sánchez resaltó que cuando supo que De Juana iba a ser liberado se sintió "muy mal" porque "cuando coges a un terrorista hay que derrotarle". De hecho, se mostró convencida de que es "difícil" que en las circunstancias actual se pueda acabar con el terrorismo en España, porque a los terroristas, dijo, "los cogen, entran y vuelven a salir".

Por todo ello mostró su apoyo a la manifestación convocada para el sábado por el Partido Popular contra la prisión atenuada de Iñaki de Juana, porque ella misma es "la primera que iría a protestar por eso".