El proyecto de los Presupuestos Generales del Estado ha traído malas noticias para el Museo Nacional de Arte Romano de Mérida (MMAR). Y lo hace en dos vertientes. Por un lado, porque retrasa en dos años el periodo de ejecución de la ampliación de las dependencias centrales del mismo, previstas en un solar anexo, y en las que trabaja el arquitecto Rafael Moneo, autor del edificio inaugurado en 1986. Así, si en las previsiones de los PGE de 2010 se establecía el 2012 como último ejercicio con inversiones previstas, en las cuentas del Gobierno para el próximo ejercicio se retrasa hasta el 2014. Asimismo, plantea un recorte de un millón de euros en los fondos que reserva el Ministerio de Cultura a este fin, reduciendo de 14,5 a 13,5 millones la inversión total del proyecto.

Por otra parte, el nuevo edificio que albergará la colección visigoda, dependiente del propio MNAR y actualmente en la iglesia de Santa Clara, también se ha visto afectado. En este caso no en el plazo de finalización de la obra, que mantiene el año 2013 como el último para el que se reservan fondos, pero sí en la cuantía de los mismos, que lo hace en tres millones de euros, pasando de los 11,5 millones inicialmente previstos a los 8,5 millones.

El director del MNAR, José María Alvarez Martínez, prefirió ayer no entrar a valorar estas cifras, porque, según dijo, es algo que "solo le compete al ministerio". Unicamente se limitó a destacar el "gran trabajo" realizado por el personal del museo en la redacción de los proyectos, y que espera que puedan ser una realidad "lo antes posible" porque, según dijo, son ya muchos años los que se llevan esperando unas inversiones necesarias para el centro.