El excoordinador general de IU Julio Anguita señaló ayer en Mérida que la decisión de la federación extremeña de IU de dejar a las bases que decidieran si facilitaban el gobierno del PP o no fue de "una dignidad extraordinaria".

Para Anguita, dicha decisión --que acabó abriendo la puerta de la gobernación a Monago-- debería tener una influencia "positiva" para la formación izquierdista en las elecciones de mañana en la región.

"Un caso de actitud más limpia, más honesta y más valiente no conozco", sentenció, en alusión al proceder de IU de Extremadura, Julio Anguita, quien entiende que dicha posición "no debe" restar opciones electorales en la región extremeña, si bien él tampoco puede "asegurar el nivel de comedura de coco" que ha causado el "llamamiento de 'todos contra la derecha'" por parte del PSOE.

En su primera rueda de prensa tras doce años, como él mismo confesó, y momentos antes de pronunciar un mitin en Badajoz, Anguita sostuvo que tras las elecciones lo que debería hacer IU es abrir una "convocatoria" al resto de fuerzas políticas que lo consideren para ver si "se puede llegar a un acuerdo" en torno a un "frente común" contra lo que ha denominado "golpismo" y "fascismo financiero" de los mercados.

Además, advirtió de que el compromiso de Rajoy "de que no tocaría las pensiones con números en la mano" se ve que "va a ser difícil que la cumpla".