La segunda fase del apagón analógico, prevista en un primer momento para el 31 de diciembre pasado, pero que se adelantó a mediados de diciembre en seis municipios de la región y se interrumpió durante las fiestas navideñas, se volvió a retomar ayer, pero de nuevo con retraso. Según aseguró el Ejecutivo regional a este diario en diciembre, la transición en los 119 municipios del norte de Cáceres afectados en esta segunda fase concluiría el 17 de enero, pero finalmente lo hará a finales de enero.

De momento, el último plazo dado se esta cumpliendo y ayer Navaconcejo, Casas del Castañar y Garganta la Olla cesaron sus emisiones analógicas, continuando así con la segunda fase de transición a la Televisión Digital Terrestre (TDT) iniciada en diciembre. El resto de municipios irá haciendo lo mismo de forma escalonada en las áreas Cáceres Norte y Valle del Tiétar hasta el 28 de enero, según apuntan desde la Asociación de Instaladores de Telecomunicaciones de Extremadura (Asitelex).

Este segundo retraso ya se veía venir según los instaladores, ya que pese a estar las actuaciones necesarias efectuadas prácticamente al 100%, "todos los centros deberían estar funcionando ya y la cobertura no es la que debería haber en estos municipios", explica el presidente de Asitelex, Juan José Nieto, que señala además que dada los problemas que existen, el apagón podría prolongarse hasta febrero.

Problemas que imposibilitan la llegada de la señal digital a varias poblaciones o que la distorsionan, debido a las excepcionales inclemencias meteorológicas de las últimas semanas, según explica el director general de Administración Electrónica de la Junta de Extremadura, Jaime Gragera. Y según los instaladores, debidos también a una mala gestión de la UTE (Infostock, Europa de Extremadura, Promotora de vídeo e Instelca SL) adjudicataria del proyecto de la Junta para llevar la señal al 10% del territorio incluido en esta fase donde el radiodifusor nacional Abertis, encargado del grueso del proyecto en todo el país, no da cobertura.

Unos obstáculos que siguen existiendo a pesar de iniciarse los apagones. "Es un verdadero desconcierto", critica Nieto, que ayer por la tarde desconocía en qué situación se encontraban los pueblos afectados. Y todo, señala. "porque los que tenían que estar cumpliendo --la empresa encargada-- no están funcionando".

Según Gragera, las actuaciones encargadas en esta ocasión, entre las que se incluye la instalación de 40 centros reemisores --37 para dar cobertura a los municipios de la segunda fase y el resto para localidades de la segunda y la tercera fase, que será el 31 de abril--, "están prácticamente terminadas al 100% desde antes de Navidad".

En la actualidad la empresa encargada del proyecto, por valor de 5,3 millones de euros, al tiempo que ha comenzado a apagar centros reemisores en tres municipios está "ultimando ajustes y reparando los fallos provocados por el mal tiempo, que ha complicado el mantenimiento de los servicios". "Hay que asegurar que esto no vaya a suceder más, para ofrecer un servicio de calidad y estable", señala Gragera.

Mientras, Nieto culpa a la empresa de estos retrasos, ya que "el 20 de diciembre fue el plazo dado en el concurso de adjudicatarios para finalizar todas las actuaciones, pero a 15 de diciembre no estaba ejecutado ni el 10% de las obras necesarias", lo que según los instaladores, ha ralentizado el proceso. A pesar de que las actuaciones están ejecutadas prácticamente al 100%, asegura también, "está habiendo muchos problemas técnicos". De hecho, apunta Nieto, hay poblaciones que no reciben la señal digital a días del apagón, como Oliva de Plasencia. Con este panorama, los instaladores están "enfadados" porque "no se están haciendo bien las cosas y quien finalmente paga el pato es el instalador, que es la persona a la que se llama cuando las cosas no van".

Desde la Junta confían en que el proceso se realice sin problemas como ocurrió en la primera fase, el 30 de junio, que afectó solo a 30 municipios, por lo que se pudo realizar un "apagado simultáneo", destaca Gragera. En este primer apagón, no se han registrado incidencias puesto que "no tenemos constancia de quejas y solo una persona nos ha solicitado el receptor satélite para captar la señal".

Tras apagar cinco centros reemisores en diciembre, Abertis y la UTE se han puesto manos a la obra de nuevo. "No es un procedimiento sencillo. Es necesario el desplazamiento de personal a cada centro".

Por ello, la Junta está en contacto con los ayuntamientos para informar de la fecha exacta del apagón en cada municipio. Pero pese a que no hay un calendario de cese de emisiones, asegura Gragera, "el ciudadano sabe que desde el 15 de diciembre es susceptible al apagado y ha tenido tiempo para adquirir el receptor o revisar la antena", un paso "imprescindible".