La construcción del enlace ferroviario de alta velocidad entre Madrid y Lisboa a través de Badajoz supondrá a los gobiernos de ambos países una inversión global que rondará los 6.000 millones de euros, de los que unos 1.900 corresponden al trazado extremeño, según los informes que manejan ambos ejecutivos. Hoy es el día fijado para que el presidente español, José María Aznar, y el primer ministro portugués, José Manuel Durao Barroso, ratifiquen públicamente en la cumbre ibérica de Figueira da Foz la conexión a través de Extremadura y marquen plazos concretos para todas las uniones de AVE entre los dos estados vecinos. Mientras, los periódicos de Portugal dan por hecho el trazado extremeño y esperan lograr a cambio compensaciones en otros ámbitos vitales para su país.

La conexión ferroviaria de alta velocidad pactada por los dos estados, avanzada por este diario y ratificada en la cumbre ibérica ayer, implica que el AVE internacional enlazará a 350 kilómetros por hora Lisboa, Evora, Caya/Badajoz, Mérida, Cáceres, Plasencia, Navalmoral, Talavera y Madrid. Aznar y Durao ofrecerán hoy todos los detalles. Diferentes fuentes gubernamentales señalan que se fijará el 2010 como fecha límite para su puesta en marcha.

INVERSION PRIVADA

Teniendo en cuenta las dificultades financieras que atraviesa en los últimos años el país luso, y que se aprobarán hasta cuatro trazados de alta velocidad ibéricos en esta cumbre (Vigo, Salamanca, Badajoz y Huelva), desde el Gobierno del país vecino se ha dejado entrever la posibilidad de que el sector privado colabore en la construcción del AVE.

Y es que esta infraestructura supondrá una inversión descomunal para España y Portugal. Con un coste de 9 millones de euros por kilómetro, hay que tener en cuenta que su coste total supone, por ejemplo, casi el doble de los presupuestos autonómicos extremeños, veinte veces más que el presupuesto anual del Real Madrid o 66 veces la inversión en los cacereños túneles de Miravete.

Fuentes del Gobierno luso reiteraron ayer que el acuerdo del AVE por Badajoz está cerrado con el objetivo de enlazar Lisboa y Madrid en 2 horas y 45 minutos. Hoy, en torno a las dos de la tarde (hora española), Aznar y Durao detallarán el proyecto en el Auditorio del Centro de Artes y Espectáculos de Figueira da Foz.

Los periódicos portugueses han seguido con atención las negociaciones de los últimos meses y consideran que el paso del AVE por Badajoz es una "imposición" del Gobierno español que margina a todo el norte del país, incluido el centro económico luso, Oporto.