Tema del día, de la semana y quizá el mes, indiscutible, los responsables de las diputaciones y ayuntamientos de Extremadura valoraron ayer el plan de reajuste del Gobierno y, muy especialmente, el recorte de sueldos para funcionarios y cargos. Como no podía ser de otra manera, los responsables de estas instituciones en Extremadura acatan la decisión del Ejecutivo central, con más o menos matices según su color político, pero muestran bastante dudas sobre cómo podría ponerse en funcionamiento.
Es el caso de los responsables de las diputaciones provinciales, José Andrés Tovar en Cáceres y Valentín García en Badajoz. Ambos mostraron su respaldo a unas iniciativas que reconocen harto difíciles, pero indispensables en la coyuntura actual. Por tanto, se mostraron partidarios de aplicarlas en los organismos que presiden, siguiendo las directrices que fije tanto el Gobierno central como su partido, el PSOE extremeño, que más tarde anunció una rebaja en la remuneración de los cargos en la misma medida que la que de los funcionarios.
ALCALDES También el presidente de la Federación Extremeña de Municipios y Provincias de Extremadura (Fempex), Ramón Díaz Farias, se pronunció en esa línea en una entrevista en Canal Extremadura Radio .
Muy crítico fue el alcalde de Badajoz, Miguel Celdrán (PP), que aseguró sentir vergüenza del presidente del Gobierno porque no ha tenido la "dignidad" ni la "hombría" para dimitir. Celdrán reconoció haberse quedado "helado" al ver la "caradura" de Zapatero al presentar unas medidas "sumamente duras", cuando venía negándose a ello desde hace dos años. Celdrán anunció que si hay que sacrificarse "este alcalde va a ser el primero", aunque recordó que él se bajó hace un año y medio el salario un 4%. No obstante, esperará "a ver cómo queda el sueldo de Vara, los consejeros y los diputados de la Asamblea", informa G. Leitón.
Más breve fue la alcaldesa de Cáceres, Carmen Heras (PSOE), que no concretó si tomará alguna medida, más allá de las que obligue la ley. Heras indicó que se trata "de recortes a nivel general" y recordó que activó al llegar al gobierno "un plan de saneamiento". Sin más detalles, concluyó diciendo que "ya llevamos tiempo apretándonos el cinturón", informa C. Ortiz.
El alcalde Mérida, Angel Calle (PSOE) sí que mostró su clara determinación de aplicar los recortes y reducir los salarios "empezando por los más altos". No obstante, instó a la Fempex a definir las directrices para que todos los consistorios las siguieran, informa E. Press.
Su homóloga en Plasencia, Elia María Blanco (PSOE), recalcó que el plan de Zapatero es un "ejercicio de responsabilidad" y recordó que su ayuntamiento tiene los salarios congelados desde hace dos años.
Más allá ha ido el PP de Don Benito, que gobierna el ayuntamiento con Mariano Gallego al frente y que presentó el miércoles una moción para el próximo pleno que prevé recortar el sueldo de los concejales liberados un 15%. No obstante, estará condicionada al decreto-ley que apruebe el Consejo de Ministros, aplicándose en su caso la medida más favorable para el trabajador. Por su parte, el consistorio villanovense no quiso hacer declaraciones, informa C. Paredes.
Sí las realizó el alcalde de Almendralejo, José María Ramírez, que apuntó hacia una posible modulación de los recortes, para adecuarlos a la remuneración de cada cargo. En cualquier caso, reconoció que se trata de una medida muy impopular, lo que, a su juicio, demuestra su extrema urgencia. "Es necesaria, si no, a nadie le agrada hacer algo así", sentenció.
