Emilio Botín firmaba el 26 de septiembre de 2013, en una de sus últimas visitas a la región, un convenio de colaboración con el gobierno de Extremadura para poner 15,7 millones de euros a disposición de autónomos y pequeñas empresas. El objetivo era facilitar a las empresas la contratación de créditos de hasta 250.000 euros.

No era el primer acuerdo para aportar financiación que el banquero firmaba en Extremadura. Con anterioridad ya había suscrito convenios con la Universidad de Extremadura, firmados con sus rectores Francisco Duque y Ginés Salido, para la financiación de actividades académicas. Su hija, Ana Patricia Botín, quien le sustituye al frente del Banco Santander, también ha participado en numerosas actividades en la región.

El presidente del gobierno de Extremadura, José Antonio Monago, lamentó ayer el fallecimiento de Emilio Botín, al que calificó como "un embajador de España en el sector financiero".