Aunque el Gobierno de Estados Unidos no ha completado los objetivos clave de su ataque a Irak, como encontrar las armas de destrucción masiva que, según Washington, tenía el régimen del derrocado Sadam Husein, el presidente George Bush se dispone a declarar la victoria militar el jueves próximo, durante su visita al portaviones Abraham Lincoln , recién llegado del golfo Pérsico a su base en San Diego (California).

Los colaboradores del presidente anunciaron el viernes que Bush dirá que "la fase de combates ha concluido" y que ahora pasarán "a la siguiente etapa". Y explicará sus planes para la reconstrucción de Irak y la continuación de la guerra al terrorismo. El alcalde de Nueva York, Michael Bloomberg, ha propuesto honrar a las tropas que regresan con un brillante desfile por Wall Street, la gran avenida financiera local.