El ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, precisó ayer que, al margen de la desviación de precios, la subida de las pensiones mínimas para el 2005 es la más alta desde 1990 y supone un primer paso en el compromiso del Gobierno de elevar estas pensiones en un 26% en toda la legislatura. Por su lado, Octavio Granado destacó que el incremento adicional de las pensiones mínimas redundará en una mayor equidad social, territorial y entre sexos de la cuantía de las prestaciones, al tiempo que todos los pensionistas no tendrán que soportar una mayor presión fiscal al decidir el Gobierno deflactar la tarifa del IRPF, lo que, según dijo, no sucedió en ejercicios anteriores.

El ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, rechazó ayer que exista descoordinación en las manifestaciones del Gobierno en materia económica, tal y como sostuvo en la sesión de control al Gobierno del Congreso el secretario general del PP, Angel Acebes. Según el dirigente del PP, hay buena parte de la opinión pública que cree que "nadie coordina, ni dirige la política económica" del país. Acebes también criticó el que ya se hayan dado "tres versiones" acerca de si se mantienen o no las deducciones fiscales en la compra de vivienda o en los planes de pensiones privados. Esto ha generado "preocupación" entre los ciudadanos, que han formado "grandes colas" ante los bancos para informarse.