Sus majestades de Oriente, los Reyes Melchor, Gaspar y Baltasar no defraudaron en Trujillo y recorrieron las calles ante la presencia de miles de niños que los esperaban con la cara resplandeciente de ilusión. La comitiva partió desde el mercado regional de ganado a las siete de la tarde, ocupando un trono cada uno de los Reyes Magos, elaborados por la Asociación Cultural Entierro de la Sardina, por la asamblea local de la Asociación Española Contra el Cáncer y por la Hermandad Virgen de la Piedad. Además, cinco carrozas les acompañaron, decoradas con diferentes motivos, como fueron la blanca Navidad, el mundo Lego o los superheroes. Sin embargo, no fueron los únicos que quisieron acompañar a los visitantes que llegaron para dejar miles de regalos a los niños de la ciudad, ya que también hubo acompañamiento a caballo y sobre segway. Y todo ello en un ambiente mágico, festivo, de luz y música de la mano del grupo de percusión y fuego Santuka. Aunque uno de los momentos más emocionantes fue cuando los tres Reyes Magos hicieron su entrada en la plaza Mayor para adorar al Niño Jesús en su pesebre, mientras acompañaba el coro de mayores. Las palabras de bienvenida del alcalde de Trujillo, Alberto Casero pusieron el broche a la cabalgata, que terminó con la entrega de golosinas a los niños. También tuvo una gran acogida el Belén Viviente que se llevó a cabo en Huertas de Ánimas, donde participaron buena parte de sus vecinos.

Antes de regresar a Oriente, sus majestades visitarán hoy a los mayores de la Residencia Santa Isabel, organizado por la Cofradía Nuestra Señora de la Soledad de los Antiguos Cruzados.