Miles de agricultores han mostrado el hartazgo del campo extremeño en una jornada de cortes en 12 carreteras de la región que no han registrado incidentes, pero sí concentraciones masivas. Más 19.000 agricultores según los organizadores y 7.000 para la Delegación del Gobierno, han provocado retenciones de varios kilómetros durante varias horas a lo largo de la mañana. Los cortes en Navalmoral de la Mata (en la A-5) en la provincia de Cáceres y en Almendralejo (en la A-66) en el caso de Badajoz fueron los ‘puntos calientes’ de la jornada que ha servido para alzar de nuevo la voz contra la situación «insostenible» que ha ido minando la rentabilidad del sector agroganadero hasta abocarlo a una profunda crisis, que está llevando al límite a muchas familias y amenazando el futuro de las zonas rurales.

Apag Extremadura Asaja y Asaja Extremadura convocaron la protesta que ha sido secundada por UPA-UCE, COAG y Aseprex. Desde primera hora de la mañana, miles de agricultores fueron ocupando los aledaños de las zonas señaladas para los cortes mientras Policía y Guardia Civil comenzaban a vigilar también que la protesta se desarrollara en los términos previstos en los 12 puntos autorizados (siete en la provincia de Badajoz y cinco en la de Cáceres). Equipados con chalecos reflectantes, con pancartas en los que se podía leer el lema de la protesta ‘Por el futuro del campo. Precios justos’ y ondeando banderas de Extremadura, de España, portando cencerros o cargando con ramas de tabaco como banderolas, han denunciado la calamitosa situación del campo.

«Este debe ser el primer paso para que no se posponga más la solución a los problemas del campo», reclamaba un agricultor en el corte de Casar de Cáceres en la A-66. Los paros se habían autorizado por un tiempo máximo de cinco horas en el caso de las carreteras convencionales o de dos horas en los puntos de las autovías, aunque esos márgenes no se cumplieron en todos los casos. En la autovía A-5, por ejemplo, los agricultores impidieron se restableciera el tráfico durante más de cuatro horas a la altura de Badajoz; y en el caso de Navalmoral de la Mata, no abandonaron la calzada hasta que llegaron los antidisturbios, pasadas las cuatro de la tarde, tres horas después de lo permitido aunque sin resistirse a las indicaciones de los agentes.

Las organizaciones agrarias habían hecho un llamamiento a agricultores y ganaderos para que secundaran las movilizaciones de forma pacífica y a la sociedad en general para que se solidarizara con sus reivindicaciones. Aunque los cortes han generado atascos y circulación lenta en diversos puntos de la red de vías, la mayoría de los conductores afectados se han solidarizado con los manifestantes y no se han producido incidentes de gravedad.

«Hartazgo»

«Hartazgo»En Almendralejo, más de 3.000 agricultores y 300 tractores según los organizaciones (2.000 y 120 respectivamente para la Delegación del Gobierno) asaltaron la autovía A-66, a la altura de la salida 648, paralizando los cuatro carriles y provocando escenas de tensión con algunos conductores que quedaban atrapados. La jornada en la capital de Tierra de Barros dejó imágenes impactantes, como una tremenda hilera de tractores por la autovía, muchos de ellos con carteles reclamando precios dignos, soluciones inmediatas o criticando al Gobierno de la nación.

Juan Metidieri, presidente de Apag Extremadura Asaja, fue testigo de las protestas en Almendralejo. «Es un día histórico, precisamente por el hartazgo y la desgracia que estamos sufriendo en el sector primario. Tenemos unos precios ruinosos, hay una asfixia en la normativa y se siguen generando recortes», denunciaba. «Si de verdad quieren darle soluciones a la España vaciada, que den soluciones al sector primario, que es la base en toda Extremadura», exigía.

En Navalmoral más de 4.000 manifestantes (1.000 según la Delegación) cortaron también la A-5 durante más de cinco horas, según los datos de la organización. A la protesta se dirigían unos 200 tractores, que finalmente no pudieron sumarse. Los manifestantes ocuparon desde el inicio los cuatro carriles y fue necesario habilitar un recorrido alternativo para los conductores y se registraron más de 4 kilómetros de retenciones en el sentido Madrid. En ese punto, los manifestantes no abandonaron la protesta hasta la llegada de los antidisturbios a la zona.

«No queríamos disturbios. Nosotros tenemos la fuerza de la razón, nos dedicamos a producir y queremos seguir dedicándonos a dar de comer a España, pero con unos precios dignos. La protesta ya ha sido un éxito», en palabras de Ángel García Blanco, presidente de Asaja Extremadura, que participó en esa convocatoria.

También se registraron retenciones importantes en Badajoz, en la zona más próxima al límite con Portugal en el acceso por la A-5, donde el corte de la carretera se prolongó durante más de cuatro horas. Hubo colas y tráfico lento en el centro de la ciudad por el tránsito de los 130 tractores que se dirigían a la zona de la protesta a primera hora de la mañana y hasta cinco kilómetro de vehículos atascados en la A-5 por el corte. «Es una jornada histórica, que sirve para denunciar la situación tan grave que está viviendo el campo y para decirle al Gobierno que no podemos esperar más», decía allí Ignacio Huertas, secretario general de UPA-UCE.