La Sareb, el conocido como banco malo, gestiona en Extremadura 1.700 activos aunque la porción que tienen a la venta para particulares no llega a los 300. El resto son pisos en alquiler o, por ejemplo, los que cedió hace unos meses a la Junta para destinarlos a alquiler social, además de otro tipo de propiedades como suelo.

La entidad es en todo caso la que más pisos tiene a la venta en la región (290) y logró colocar en el primer semestre de año cerca de un centenar, la mayoría pisos, pero también garajes y anejos. En todo caso, la Sareb no vende, de hecho son otras inmobiliarias --Altamira, Haya Real Estate, Servihabitat y Solvia-- las que comercializan sus activos tras adjudicarse cada una de ellas una parte de la cartera en el 2014. Aun así, sí se pueden consultar las referencias en el portal de la Sareb (www.sareb.es).

Más allá de que se le conozca popularmente como ‘banco malo’, lo cierto es que la Sareb no es un banco. En realidad no tiene ni licencia bancaria y por ese motivo no puede financiar los activos que integran su cartera. Y no lo hace, aunque sí cuenta con una serie de ventajas para sus compradores, a través de los acuerdos que ha suscrito con otras entidades ---Santander, Sabadell, BBVA, CaixaBank, Banco Popular, Caja Rural, Kutxabank, ING Direct, Bankinter y Uci-- para ampliar las posibilidades de los compradores para obtener financiación. Junto a eso, los compradores de activos de la Sareb están exentos de pagar el Impuesto de Actos Jurídicos Documentados por el préstamo que suscriban. H