La crisis ha cerrado en los dos últimos años en Extremadura 2.279 negocios. Los datos del Directorio Central de Empresas (Dirce) señalan que a inicios del 2008 había registradas en la región 67.852 actividades, mientras que a comienzos del 2010 esa cifra ha caído hasta las 65.573. Pero, la recesión económica no ha afectado igual a todos. Los pequeños empresarios (sobre todo con menos de 5 trabajadores) dedicados al sector de la construcción y el textil, y los autónomos y actividades del comercio al por menor se han visto obligados a cerrar sus negocios; mientras el sector del automóvil ha suplido la situación en tanto ha habido ayudas a la compra; antes y después, también se ha visto muy afectado. Por el contrario, la desaceleración económica ha hecho aflorar empresas dedicadas a reparación de vehículos, suministro de energía, mantenimiento de ordenadores y servicios a edificios, entre otras; y es que los consumidores se decantan más por arreglar lo que ya tienen antes que adquirir coches o electrodomésticos nuevos.

La tendencia negativa se ha ido acrecentando con el paso de los años. Así, según señala este anuario, del 2007 al 2008 (antes de que comenzara la crisis) se crearon en Extremadura 1.620 empresas; pero del 2008 al 2009 cesaron su actividad 671; y del 2009 al 2010 lo hicieron 1.608.

La razón es muy simple, y es que con el incremento del paro en sectores como la construcción, el consumo cae y eso se resiente sobre todo en el comercio, que son los negocios que cierran en mayor medida, más cuanto más pequeña es la empresa. "Los empresarios estamos sujetos a la evolución del consumo", explica Enrique Barrasa, vicepresidente de la Asociación de Empresarios de Mérida (Aeme), y si hay más paro, los consumidores no gastan tanto.

Esta situación se aprecia en el incremento de la actividad de empresas dedicadas al mantenimiento y reparación de vehículos, reparación de ordenadores, servicios a edificios y actividades de jardinería, de industrias químicas y de suministro de energía. En el caso de los negocios que prestan servicios a edificios, el número de empresas se ha duplicado en los dos últimos años (de 301 en el 2008 a 635 en el 2010). Otro caso significativo es el de aquellas actividades dedicadas a la reparación de vehículos a motor, que se han incrementado en casi 300 en este mismo período.

LOS MAS PERJUDICADOS Por el contrario, la mayor parte de las que viven de la construcción se han visto muy perjudicadas. Basta un ejemplo, en los dos últimos años el Dirce ha registrado 927 empresas menos en la región en el sector de la construcción de edificios, 113 menos promotoras inmobiliarias, o casi 400 menos de las que trabajan en el acabado de edificios.

Otro sector que está sufriendo especialmente las consecuencias de la crisis es el del comercio al por menor, salvo en los dedicados a vehículos a motor y motocicletas, se apunta el Dirce. A este respecto, han cesado su actividad en los dos últimos años 748 negocios de este tipo, en especial los dedicados a la venta de productos de alimentación, bebida y tabaco.

Las actividades derivadas del sector del transporte tampoco se libran y ha caído a la mitad en número de negocios.