CCOO consideró ayer una "provocación" que desde las cinco de la mañana de ayer ya hubiera un "fuerte cordón" de la Guardia Civil en la puerta de entrada de la acería de Siderúrgica Balboa, a pesar de que no se había registrado ni un solo problema en las anteriores jornadas de huelga. Esta circunstancia, a su juicio, ha impedido que se pudiera informar a la plantilla de los motivos de la huelga cuyo seguimiento, según CCOO, ha sido una vez más "prácticamente unánime", de casi el cien por cien de la plantilla. CCOO negó cualquier agresión o insulto.