Los sindicatos UGT y Comisiones Obreras aprovecharon ayer el Día del Trabajo para reclamar una mayor estabilidad y seguridad en el empleo. Sin embargo, la jornada quedó ensombrecida porque, debido a las diferencias que mantienen, las centrales sindicales celebraron en Extremadura el 1 de Mayo por separado por primera vez en 14 años.

En total unas 2.600 personas siguieron los actos celebrados ayer en Mérida (unas 2.000 en la marcha de CCOO y 600 en la fiesta-mitin de UGT), en los que las fuerzas sindicales exhibieron unos lemas muy similares. UGT introdujo un pequeño matiz, "por la paz", en referencia a la tregua indefinida declarada por la banda terrorista ETA.

NO A LA SINIESTRALIDAD El secretario regional de Comisiones Obreras, Julián Carretero, encabezó la marcha organizada por su sindicato y en la que, con el lema "No a la siniestralidad. Empleo estable en igualdad", participaron unas 2.000 personas.

Carretero denunció que la siniestralidad laboral se está convirtiendo "en una mochila excesivamente pesada" tanto para los trabajadores como para los sindicatos.

El líder de CCOO animó a los ciudadanos a contestar con un "no rotundo" a la siniestralidad laboral, así como a reclamar un empleo estable en situaciones de igualdad. Se trata, añadió, de "dos reivindicaciones que por manidas no dejan de estar vigentes y que son las que más preocupan a los trabajadores".

El dirigente sindical aprovechó, además, para mostrar su apoyo a diversos colectivos de la comunidad autónoma, como los trabajadores de RTVE, los bomberos y los policías locales.

Al mismo tiempo insistió en la necesidad de que los jornaleros se integren en el régimen general de la Seguridad Social para que haya "una reconversión real" que permita "que haya igualdad" también para ellos.

Por su parte, el secretario regional de UGT, Miguel Bernal, destacó en primer lugar los "avances importantes" logrados en materia sociolaboral en los dos años de Gobierno de Rodríguez Zapatero.

Sin embargo, Bernal no se mostró satisfecho debido a la "situación de precariedad y de falta de empleo tan brutal y tan importante" que se da en Extremadura. Así, insistió en que "no podemos seguir con los actuales índices de siniestralidad laboral". En este sentido, reclamó un papel más activo de las Administraciones, que a su juicio deben destinar más recursos a la inspección de Trabajo, crear una fiscalía especial en la región para esta materia y exigir un mayor cumplimiento de la normativa.

Otras de sus reivindicaciones fueron la descentralización del Plan Especial de Empleo, la reforma agraria y la aprobación de un pacto por la inmigración. Asimismo, destacó la singularidad del Día del Trabajador en un año en el que se cumplen 75 años de fundación de federación de enseñanza de UGT, 75 años de la proclamación de la Segunda República y 30 años del primer congreso "en libertad" de UGT tras la dictadura.

ALEJAMIENTO SINDICAL Por lo que se refiere al hecho de que las centrales sindicales hiciesen ayer sus celebraciones por separado, Miguel Bernal restó trascendencia a este hecho porque "en los 30 años de democracia han sido más los años que no hemos ido juntos que los que sí". En su opinión, este año "no se daban las circunstancias" para hacer un acto conjunto, aunque considera que la unidad de acción no está en peligro "porque es otra cosa".

Mientras, Carretero reconoció que teniendo en cuenta que ambos sindicatos comparten sus reivindicaciones "hubiese sido muy conveniente que estuviésemos en un 1 de Mayo conjunto, unitario". Por eso apeló a la "responsabilidad" de ambas entidades, que según dijo obliga a sus responsables a "acercar posturas cuanto antes". El líder de CCOO se comprometió a hacer "los esfuerzos necesarios para restituir cuanto antes esa unidad que beneficia a los trabajadores".