El alcalde de Badajoz, Miguel Celdrán, negó ayer rotundamente que él hubiese recomendado a José Antonio Monago que renunciase al escaño en el Senado, aunque reconoció que "le viene bien" esta decisión. También comentó que en un primer momento su elección como senador le suponía "una gran satisfacción y orgullo", pues supone un reconocimiento del partido a uno de sus colaboradores "desde hace 17 años".

Respecto a la decisión adoptada por Monago de renunciar al escaño, Celdrán afirmó ser "sumamente respetuoso con las decisiones personales" y señaló que lo único que le recomendó fue que se tomase 48 horas para "no tener que lamentar cierta precipitación". No ocultó el alcalde pacense que la decisión del concejal "coincide con el proyecto que este alcalde tenía pensado" y dijo que se lo agradece porque piensa que uno de los motivos que habrán influido en él son "los proyectos tan sumamente importantes de la ciudad en esta legislatura, en los que él tiene una parte muy importante". Asimismo, insistió en que la decisión de Monago de decantarse por su ciudad le "dignifica" y que si se hubiese ido al Senado, él habría tenido que "reorganizar" las responsabilidades municipales.

Respecto a quién puede sustituir a Monago, Celdrán no escatimó elogios hacia Cristina Herrera, de quien dijo que espera que su nombre se vuelva a poner sobre la mesa porque "puede hacer un papel maravilloso", como también pueden hacerlo Diego Sánchez Luque, Cristina Teniente o Luis Alfonso Hernández Carrón.