Un informe del Servicio de Inspección del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) sobre la Justicia en España confirma que en Extremadura hay en torno a una veintena de juzgados --en los que trabajan más de treinta magistrados-- con unas infraestructuras que califica de "deficientes". El documento, al que ha tenido acceso EL PERIODICO EXTREMADURA, llega a señalar que algunos de estos edificios son "totalmente inadecuados para la prestación de este servicio público".

El extenso estudio realizado por el CGPJ desvela que hay muchos juzgados en la comunidad autónoma en los que no funcionan correctamente cosas tan elementales como el aire acondicionado, la calefacción, el sistema telefónico o incluso los aseos. La presencia de humedades, la falta de seguridad, la existencia de barreras arquitectónicas e incluso las termitas y los malos olores son otros de los problemas habituales con los que se encuentran los trabajadores del Ministerio de Justicia a la hora de desarrollar su trabajo.

LAS SEDES AFECTADAS Los tribunales que se encuentran en peores condiciones son los juzgados de lo Penal de Badajoz, Mérida y Plasencia; las dos sedes de la Audiencia Provincial de Badajoz, tanto en Mérida como en la capital pacense; el juzgado de lo Contencioso Administrativo de Cáceres; el juzgado de Familia de Badajoz; y los juzgados de Primera Instancia e Instrucción de Zafra, Badajoz (4 de ellos), Herrera del Duque, Montijo, Mérida y Valencia de Alcántara.

En total son una veintena de juzgados, aunque hay que tener en cuenta que en algunos casos ya hay planes para la construcción de nuevas sedes. De esta forma, en Mérida está prevista la puesta en marcha de un Palacio de Justicia, mientras que habrá nuevos edificios al menos en Herrera del Duque, Zafra y Valencia de Alcántara.

El informe del Servicio de Inspección del CGPJ señala que el Palacio de Justicia de Badajoz, que acoge cuatro de los juzgados de Primera Instancia e Instrucción del partido judicial pacense, es un edificio antiguo, mal conservado, que tiene problemas en los aseos, la calefacción, el aire acondicionado y los sistemas eléctrico y telefónico. Por lo que se refiere al juzgado de Herrera del Duque, es "totalmente inadecuado para la prestación de este servicio público", no tiene ninguna medida de seguridad y está repleto de barreras arquitectónicas.

También resultan "totalmente inadecuados" los juzgados de Montijo y de Valencia de Alcántara que, al igual que el anterior, no disponen de medidas de seguridad y sí de barreras arquitectónicas.

FALTA DE ESPACIO En el caso de los cuatro juzgados de Primera Instancia e Instrucción de Mérida, el estudio habla de edificios antiguos "con escasos espacios habilitados para oficinas judiciales y con grandes dificultades para gestionar el adecuado mantenimiento de las instalaciones". A los problemas ya habituales el juzgado de Zafra suma "las humedades".

Tampoco están mucho mejor las dos sedes, en Badajoz y Mérida, de la Audiencia Provincial, donde once magistrados trabajan y conviven diariamente con deficiencias en conductos de agua, climatización y sistema telefónico. Algo similar ocurre en los dos juzgados de lo Penal de la capital pacense y en el juzgado de lo Penal de Mérida.

Las instalaciones del juzgado de lo Contencioso Administrativo de Cáceres son demasiado "pequeñas" y el juzgado de lo Penal de Plasencia tiene problemas por el mal estado de la sala de vistas y de la calefacción.

EL OTRO EXTREMO Por lo que se refiere al resto de los juzgados, están casi todos en condiciones que se califican de "razonables", "aceptables" o "adecuadas", siendo los mejor valorados los juzgados de Menores y de lo Social de Cáceres y la sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia.

Aún así, también hay problemas en el resto de los juzgados. Muchos de ellos se quejan de la falta de sistemas de seguridad tanto externos como internos, del mal estado de los archivos, de lo obsoleto de sus programas informáticos o de las barreras arquitectónicas.

Así, por ejemplo, la sala de lo Contencioso Administrativo del TSJEx, con cinco magistrados, tiene poco espacio para el archivo y la secretaría, y los juzgados de Almendralejo sufren humedades en el archivo y un problema de termitas que levanta la tarima de la sala de vistas.

En Coria, como en Plasencia, hay humedades, pero, además, se ha detectado "un fuerte olor a gasóleo" en la entrada, y el juzgado de Llerena se queja de las condiciones de la calefacción, la tarima, la pintura... Por último, en Villanueva de la Serena el Servicio de Inspección del CGPJ habla de archivos "saturados y con humedades".

LOS ARCHIVOS Por otra parte, hay una reclamación común a casi todos los juzgados extremeños, como es la necesidad de que exista una "aplicación efectiva del real decreto 937/2003". De esta forma los tribunales reclaman la puesta en marcha de la norma que regula la "modernización de archivos judiciales", y que debería estar aplicándose desde principios del 2004, algo que, al parecer, no ocurre.

Entre otras cosas, suponía la implantación de un nuevo y más moderno sistema de gestión de los archivos judiciales.