En los últimos días es fácil ver en los pueblos y ciudades de Extremadura calles levantadas, parques que se están remodelando, edificios antiguos que están siendo reparados y un sin fin de obras más. Se trata de trabajos encargados por los ayuntamientos y que financia el Gobierno a través de los llamados fondos de inversión local. En definitiva, obras para generar empleo en estos tiempos de crisis. La mayoría de puestos de trabajo son temporales y no durarán más de seis meses, pero no dejan de ser empleos que ayudan a las familias más necesitadas.
Estos trabajos son múltiples y variados, y van desde el arreglo del estadio de fútbol en Mérida, pasando por el ajardinamiento de recintos cercanos a monumentos históricos, la mejora del alumbrado público o el arreglo de edificios religiosos, como en el caso de la ermita de la Virgen del Puerto de Plasencia.
Buena parte de las obras que se van a financiar con este dinero ya están en marcha. En la capital extremeña se adecua el fondo sur del estadio municipal para mejorar los equipamientos deportivos, así como la mejora de las instalaciones deportivas del estadio municipal. Así, son ya diez los proyectos encarrilados en Mérida desde el pasado 9 de marzo, fecha de inicio de la primera, entre ellos la mejora de infraestructuras urbanas en la barriada de San Luis, la ampliación de las instalaciones deportivas en el polideportivo Diocles, la construcción de áreas recreativas junto al acueducto de San Lázaro, el parque de la barriada de San Andrés, el ajardinamiento junto al circo romano, la optimización eléctrica de la instalación del polígono industrial El Prado, el colector de la ciudad deportiva y la adecuación del edificio de la antigua hostería para centro de día.
Son parte de las iniciativas agrupadas en estos fondos de inversión local, que en Mérida superan los 9 millones de euros, y que van a generar 400 empleos, según el ayuntamiento, informa C. Peguero.
Son trabajos que se repiten en otros lugares, como en Plasencia, donde las dos primeras obras acogidas a estos fondos han sacado del paro a ocho trabajadores. Se trata de la mejora del tejado de la ermita del Puerto y de la construcción de dos pistas de pádel en el barrio de San Miguel. Ambas tienen un plazo de dos meses de ejecución y en personal, la primera obligaba a contratar a ocho trabajadores y a cinco la segunda. La empresa Arcoex, adjudicataria del arreglo del santuario, indica que cuatro fueron contratados a través del Sexpe y los otros cuatro son personal propio, con el futuro ligado a la contratación de más obras. La otra, de Roberto Jiménez, ha contratado a cuatro porque el quinto es el propio promotor, informa M. R. Rey.
