Las comarcas del norte de Extremadura, como el Valle del Jerte, La Vera o Las Hurdes, son las que registran un mayor grado de ocupación hostelera durante estos días, especialmente en lo que se refiere a alojamientos rurales. Buena parte de esa demanda está directamente relacionada con la floración de los cerezos cultivados en esta zona de la región --cerca de un millón de ejemplares--. Sin embargo, este año --el primero tras su declaración como Fiesta de Interés Nacional-- muchos turistas tendrán que regresar a sus casas sin poder disfrutar del espectáculo que ofrece la floración casi simultánea de estos árboles frutales. El motivo es el retraso que ha originado en el ciclo de los cerezos las malas condiciones meteorológicas de los tres primeros meses del año.