El consumo de drogas, tanto legales como ilegales, entre los jóvenes extremeños se ha incrementado sensiblemente en la región durante los últimos dos años. El más llamativo es el caso de la cocaína, cuya prevalencia se ha duplicado en este periodo, mientras que también ha aumentado la incidencia de otras drogas como el alcohol, el cannabis --las más habitual entre las ilegales-- y el tabaco, según los datos de la última Macroencuesta Escolar del Plan Nacional de Drogas.
En este sentido, fuentes de la Delegación del Gobierno señalan que este amplio estudio desvela también, por ejemplo, una sensible caída en el consumo de las drogas de diseño, que parece que empiezan a pasar de moda. Otra droga que cae es la heroína, que ya es la que presenta unas menores tasas de consumo en la comunidad autónoma.
ENCUESTA BIANUAL
Este estudio, que se encuadra en el Programa de Encuestas Bianuales que desarrolla la Delegación del Gobierno desde 1994, se refiere a los jóvenes escolares extremeños de entre 14 y 18 años. En el caso de la cocaína, en el 2000 la tomaban de forma habitual el 0,9% de los menores, un porcentaje que llega al 2,1% sólo dos años después.
Más de la mitad de estos jóvenes, explica el informe, consumen de forma habitual alcohol, tabaco y cannabis, una sustancia esta última que ya llega a casi 20 de cada cien escolares. En este sentido, el sondeo concluye que un elevado porcentaje de los estudiantes consume varias drogas al mismo tiempo, de forma que se observa "una asociación bastante estrecha" entre estas tres sustancias.
Precisamente, en lo que se refiere al alcohol, en la región aumenta su prevalencia, al contrario de lo que ocurre en el resto del país. Y es que el 58,3% de los escolares reconocen que lo consumen de forma habitual pese a que se ha retrasado hasta los 15 años el inicio en el consumo semanal. Sin embargo, la encuesta refleja que los propios jóvenes son conscientes de que beben en exceso, aunque insisten en que tomar alcohol habitualmente no causa problemas de salud. También resulta preocupante el hecho de que un alto porcentaje de los menores afirme que ha conducido un coche bajo los efectos de la ingesta de alcohol.
Pero sin duda uno de los grandes problemas es el que se refiere al cannabis, la droga ilegal más consumida y que, señala el Plan Nacional de Drogas, no es percibida como un riesgo por los jóvenes. De hecho, los escolares extremeños consideran que tiene los mismos efectos para la salud que el tabaco, "un hecho preocupante para el Plan Nacional sobre Drogas, que viene insistiendo en los efectos a medio y largo plazo del consumo habitual de porros".
PERCEPCION POSITIVA
De hecho, una cuarta parte de los estudiantes de la región considera que fumar porros de forma habitual no causa problemas importantes. Por el contrario, los consumidores habituales de cannabis aseguran que sufren pérdida de memoria, tristeza, apatía y dificultad para estudiar.
La encuesta realizada por la Delegación del Gobierno también destaca la edad tan temprana en la que los escolares extremeños mantienen sus primeros contactos con las drogas. Así, explica, a los 13 años ya fuman y beben alcohol, a los 14 han probado las pastillas tranquilizantes y el cannabis, y a los 15 llegan las primeras experiencias con éxtasis, cocaína y alucinógenos.
Quizás uno de los mayores problemas es que los jóvenes están convencidos de que el riesgo para su salud no está en las sustancias que consumen, sino en la frecuencia con la que lo hacen. Aún así, el sondeo demuestra que son algo más conscientes del peligro de las drogas --excepto en el caso de cannabis-- de lo que lo eran hace dos años, algo posibilitado por la mayor información disponible.
