La misma crisis que vacía empresas y llena las listas del Inem en Extremadura, está llenado también las aulas. Las puertas cerradas de las empresas abren ahora las de los centros de idiomas, escuelas de adultos e institutos para cursar ciclos formativos. Los desempleados y aquellos en el punto de mira de expedientes de regulación de empleo, con expectativas de no conseguir trabajo en largo tiempo, miran al horizonte con nuevas metas y sobre todo con nuevas expectativas: emplear el tiempo formándose. Adultos que se sientan delante de un pupitre tras años cotizando a la seguridad social y jóvenes que han dejado los estudios tras la con o sin la ESO porque el mercado laboral tenía las puertas abiertas para ellos, y que ahora aguantan en las aulas.

En el Centro de Educación Permanente de Adultos de Cáceres están "soprendidos" ante la demanda de matriculaciones de cara al curso que acaba de empezar. Atiende este año a aproximadamente 3.500 alumnos en los diferentes programas que imparte. "Se está notando muchísimo a todos los niveles", explica José Manuel Mártir, director del centro cacereño.

Según Mártir hay enseñanzas nuevas y aún están gestionando los procesos de matriculación, por lo que no puede concretar cifras, pero el curso que más demanda genera sigue siendo el de graduado en Secundaria. "Es la estrella". Ha sido una de las enseñanzas en las que las plazas se agotaron en 15 minutos. "Abrimos a las 10 y a las 10.15 ya se habían completado las 100 plazas", comenta, una situación extraordinario este año porque normalmente "la matrícula se llena en cinco o seis días", dice.

Un caso que en esta ocasión incluso se ha registrado en el curso para el acceso a la universidad, que en otro cuarto de hora completó todas sus plazas. Esto les obligó a abrir una lista de espera que superaba ya las 70 personas a los pocos días. "Era ya surrealista porque el que tenga el puesto 70 u 80 es imposible que entre", así que han decidido eliminarla. Este panorama hay este año, parecido al pasado, según Mártir por la dificultad para acceder a puestos de trabajo. Además, "hay mucha gente que tenía negocios y que ahora se han quedado en paro y para poder partir de cero necesitan formación". Las clases son por la mañana y por la tarde.

"HASTA ARRIBA" Una experiencia similar cuentan desde Plasencia. "Estamos hasta arriba", dicen desde la secretaría del Centro Permanente de Adultos, que aún están matriculando. El año pasado tuvimos 240 alumnos y este año, sin datos aún en las manos, "por el movimiento que estoy viendo vamos a superar este cifra tranquilamente" entre todos los programas que imparten: acceso a ciclos formativos, PCPI, alfabetización, cursos de informática y graduado en Secundaria, para este último se ha abierto un segundo plazo de matrícula ante la alta demanda.

Un incremento que ya notaron el año pasado en otros centros de menor población como el de Don Benito. El perfil que viene es principalmente gente en paro que prefiere estudiar en los grupos nocturnos. Y es que este centro ofrece la posibilidad de obtener el primer ciclo de la ESO en un año. El director del centro de educación de adultos de Coria, Alfonso Gómez, aporta más detalles de este aumento, que él considera progresivo desde que se implantó el graduado en Secundaria en estos centros. "Lo que sí hemos notado son chavales jóvenes que trabajaban en la construcción que antes venían a inscribirse porque se los exigía el contrato o algo y luego se olvidaban de venir y ahora se lo han tomado en serio porque no tienen otra cosa que hacer ya".

Los idiomas son otra buena opción para periodos de desempleo. O es al menos lo que deben opinar los alumnos de más con los que cuentan este año las principales escuelas de idiomas de la región. Un claro ejemplo está en Badajoz. La EOI de la ciudad pacense sin ir más lejos tiene este año 400 alumnos más que el año pasado, que se suman a los 2.000 que se mantienen todos los cursos. "Llevábamos años al mismo ritmo y éste de pronto ha sido una avalancha", explica la directora de la escuela, Maribel Alvarado, que confirma que esta situación se repite en otras escuelas de la región.

Esta demanda que quieren cumplir al cien por cien requiere la contratación de más profesorado, no hay mal que por bien no venga. "No sabemos qué ha pasado, será la crisis, pero no teníamos prevista esta demanda, sobre todo para inglés y portugués". A pesar de todo nadie se ha quedado sin plaza.

La Formación Profesional tiene más restricciones porque las plazas están limitadas por ley, explican. Pero ha tenido una "amplía" demanda como en años anteriores, dicen desde el IES El Brocense, de Cáceres. Lo mismo ocurre en el IES Emérita, de la capital. "La demanda este año ha sido alta en los años anteriores por lo que no ha habido un cambio sustancial, pero sí ha sido mayor", explica el director.