El Ministerio de Defensa mantenía ayer serias dudas sobre si debe prolongar o no hasta junio --dos meses y medio más de lo previsto-- la misión de las tropas españolas en Irak, el 80% de las cuales están integradas por militares de la base extremeña de Bótoa. Esta posibilidad, confirmada por responsables de Defensa a El País y que no fue desmentida ayer por el ministerio, de que no haya relevo de tropas en abril, ha llenado de intranquilidad a las más de 600 familias extremeñas que tienen algún soldado en Irak.

La victoria electoral del PSOE en las elecciones generales y el anuncio de Rodríguez Zapatero de retirar las tropas de Irak en junio si la ONU no toma el mando han llevado al Ministerio de Defensa a replantearse el relevo de la actual brigada, que se iba a iniciar la próxima semana.

COSTE ECONOMICO En este sentido, y según adelantó ayer El País , el alto coste económico que supone el traslado de tropas hasta Irak ha provocado que el ministerio dude sobre la conveniencia de llevar allí a 1.300 legionarios de Viator y Málaga para cumplir una misión de sólo dos meses y medio.

Actualmente el ministerio se estaría planteando hasta tres posibilidades. La primera, llevar a cabo el relevo tal y como estaba previsto y la segunda anularlo y alargar dos meses y medio la misión iraquí de las tropas extremeñas. En las últimas horas, y según las fuentes consultadas, estaría tomando fuerza una tercera opción, hacer un relevo parcial que afectaría a cerca de la mitad del contingente. En cualquier caso, el Gobierno en funciones consultará la decisión final con el PSOE dentro de las conversaciones previas al traspaso de poderes.

Al margen de la polémica, los soldados de la brigada Extremadura XI destacados en Irak continúan estos días con su labor diaria, al margen de los últimos acontecimientos ocurridos en España. Según han relatado a El Periódico familiares de estos militares, la última información de la que disponían es que ya tenían fecha de vuelta, entre mediados y finales de abril, pero esta comunicación tuvo lugar antes del cambio de Gobierno. Tras los atentados y las elecciones no ha habido ninguna otra información del Ministerio de Defensa que cambie los planes iniciales, aunque en estos momentos su única certeza es que, dada la situación, "todo es posible". De cualquier modo, en los militares y sobre todo en sus familiares pesa la duda de si tendrán que permanecer dos meses más, pues aquí están contando los días para que sus allegados regresen, según comenta un familiar de uno de los soldados extremeños.

A LA ESPERA Otra extremeña, que tiene a dos de sus hijos en la base de Diwaniya, aseguraba ayer que no había recibido de ningún cambio de planes, y de hecho espera que el primero de ellos vuelva a casa el jueves de la semana que viene.

Por otro lado, en la Base General Menacho, de Bótoa, todo continúa conforme a los preparativos dispuestos para recibir a las tropas de la Brigada Extremadura XI y de otras unidades que forman la Plus Ultra II a mediados de abril, y no hay ninguna contraorden ni decisión oficial sobre su posible permanencia en Base España, en Diwaniya.

Fuentes militares aseguraron ayer que parece difícil que se prorrogue la estancia de la brigada, aunque en realidad, "todo depende" del Gobierno. Hasta el momento "sabemos lo que ha dicho Rodríguez Zapatero" así como lo publicado en la prensa, pero nada oficial, por lo que "en principio, el relevo se producirá cuando estaba previsto". Asimismo, señalaron que las elecciones han sido hace dos días, por lo que "si hubiera algo nuevo, tardaría días hasta convertirse en una orden".