La ministra de Fomento, Magdalena Alvarez, no ahorró ayer en elogios hacia el presidente de la Junta de Extremadura, Juan Carlos Rodríguez Ibarra. "Lo admiro y respeto por su valor para decir lo que piensa", aseguró y apostilló: "De hecho, hoy lo has vuelto a hacer". La ministra se refería a las palabras dirigidas por Rodríguez Ibarra contra los que aseguran que Monesterio es una ciudad que "sólo vive de la gente que para a tomar tapas". "No me lo creo" insistió, reiterando que es ahora cuando la localidad cuenta con mejores posibilidades para exportar sus productos. "Quizá esta sea mi última inauguración, pues tengo ya un pie fuera de la política", aseguraba ayer Rodríguez Ibarra dirigiéndose a Magdalena Alvarez, a la que también agradeció la casualidad de haber hecho posible que un extremeño y una andaluza inauguraran una autovía que une las dos comunidades. "Gracias -concluyó el presidente- por haber venido a la región no a poner la última, sino la primera piedra de esta importante obra".
También hubo críticas. La asociación Cúriga Ecologistas en Acción Monesterio denunció ayer el incumplimiento de medidas ambientales en la construcción de la autovía a su paso por la localidad de Monesterio, y calificaron de "fiasco" las medidas de impacto ambiental propuestas. En este sentido, alertaron del "grave impacto" que tienen las obras sobre la flora, fauna y los corredores de la zona. Esta asociación pide que se rectifique en lo posible los impactos producidos por esta autovía recién construida y rechaza la política y el modelo actual de transporte "por impactantes infraestructuras" frente al abandono del ferrocarril convencional. Piden, asimismo, la apertura del tren Ruta de la Plata que lleva años cortado desde Plasencia hacia el norte.
