Hace apenas unas semanas, la secretaria de Estado de Servicios Sociales, Familias y Discapacidad, Amparo Valcarce, subrayó el "importante" papel que jugará el sector privado en el Sistema Nacional de Dependencia, que se implantará a partir del próximo año.

En este sentido, aseguró que el sector privado sociosanitario tendrá su función en el sistema público. Por un lado, concertará prestaciones con las administraciones públicas y, por otro, ofertará los servicios que adquieran los beneficiarios del sistema que reciban la prestación económica vinculada a la compra de un producto en el mercado privado.

Valcarce también adelantó que las empresas que se integren en el sistema de atención a dependientes y ofrezcan algunas de las prestaciones que este incluye (ayuda a domicilio, centros de día, plazas residenciales o teleasistencia, entre otros) deberán cumplir los requisitos de calidad impuestos por el propio sistema y estar certificadas por este.

Por último, recordó que otro sector empresarial que se verá favorecido por la nueva ley de dependencia es el asegurador, gracias a la posibilidad de contratar planes privados de dependencia, para los que el Gobierno ha previsto ventajas fiscales en el proyecto de ley de reforma del IRPF. La secretaria de Estado indicó que el proyecto de Ley de Dependencia prevé que, en el plazo de seis meses desde su aprobación, el Gobierno regulará la cobertura privada de la dependencia.

Datos extremeños

Según datos incluidos en el estudio Servicios Sociales , elaborado desde la Federación de Cajas de Ahorros Vasco Navarras, en en el 2004 existían en Extremadura 151 empresas del sector de los servicios sociales, un apartado en el que quedan incluidas aquellas "actividades desarrolladas por organismos, empresas e instituciones con vocación de aportar un conjunto de servicios, prestaciones y programas al conjunto de la población, haciéndolo de forma prioritaria a aquellas personas y grupos sociales que (...) precisen de un apoyo específico que les garantice su derecho a un pleno y libre desarrollo".

Se trata de un sector con una notable tendencia de crecimiento en la región, como demuestra el que creciera un 277% entre 1999, cuando se contabilizaron 40 entidades y empresas con esta actividad en la región, y el 2004, con 151. "Algunos de los crecimientos más fuertes se han dado en comunidades autónomas que siguen presentando ratios muy bajas de entidades por 10.000 habitantes, como es el caso de Extremadura", aclaran los autores del informe. De esta forma, con 1,4 entidades de servicios sociales por cada 10.000 habitantes, Extremadura ocupa el quinto lugar por la cola entre las regiones españolas y está muy por debajo de la media nacional, situada en 2,1.

Según este trabajo, el sector privado acapara un 81% de los servicios sociales en España, con un total de 9.135 empresas y entidades registradas en el 2004, por las menos de 5.000 de 1999, Un 83% pertenecen a tipologías que no tienen afán de lucro por solo un 17% que lo tiene. Destacan las asociaciones (62%), mientras las empresas representan un 15% y un 9% las fundaciones.

Desglosadas por el colectivo al que se dirigen, las entidades vinculadas con las personas mayores constituyen el grupo más importante, con un 38% del total; un 19% se dirige al conjunto de la población; un 14% a las personas con minusvalía un 10% se centran en el ámbito de la mujer y familia, y un 7% en el de infancia y juventud.