La Junta mantiene para este curso las mismas ayudas encaminadas a la gratuidad de los libros de texto. Familias numerosas extremeñas denuncian que las ayudas económicas que la Consejería de Educación ha concedido a los centros educativos para facilitar los libros de texto no es suficiente para adquirir todos los libros y que la cuantía es la misma que el pasado curso se les concedió a ellas en mano, 120 euros. Por ello, se quejan de que desde la Junta se vendió la gratuidad de los libros de texto para estas familias cuando no es así, aseguran. Como ejemplo, una de las personas afectadas, pone el caso de la Cooperativa Docente Santa Eulalia en Mérida, donde se les ha dicho que con el dinero que les ha dado la consejería pueden comprar no más allá de tres libros, con lo que ahora se encuentran además con el problema de que no es fácil encontrar en las librerías los libros que les faltan.

Ante esta situación, la consejera de Educación, Eva María Pérez, dijo a este periódico que la gratuidad de los libros de textos "es progresiva" durante los próximos tres años y que "son los colegios" los que deben facilitarlos a las familias mediante "préstamos", ya que los centros crearán un banco de libros que los alumnos deberán devolver.

La Consejería de Educación, fruto de un convenio con el ministerio, ha concedido 9 millones de euros a los centros para la adquisición de libros de texto, una ayuda con la que se beneficiarán en torno al 50% de las familias, según la Junta. En este sentido, Pérez señaló ayer que ya se han ofrecido 60.000 ayudas para la adquisición de libros.

La consejería considera que a través del sistema de préstamos de libros de texto en los centros escolares extremeños --un sistema utilizado en otras regiones-- se fomentará la sostenibilidad en el mundo educativo y la responsabilidad social de los estudiantes, dado que a partir de ahora tendrán deberán cuidar los libros que utilicen.