Las obras del AVE extremeño correspondientes a la plataforma del subtramo Mérida-Montijo, de 16 kilómetros de longitud, las realizará la Unión Temporal de Empresas (UTE) integrada por Joca Ingeniería y Construcciones y Construcciones Sarrión. El Consejo de Administración de Adif (Administrador de Infraestructuras Ferroviarias), entidad pública empresarial adscrita al Ministerio de Fomento, aprobó en su reunión de ayer la adjudicación de las obras a esta UTE por un importe de casi 58 millones de euros (57.959.233) y un plazo de ejecución de 14 meses.

Se trata del segundo tramo de la nueva línea de alta velocidad Madrid-Extremadura-Frontera portuguesa que entra en fase de obras, tras la adjudicación, a finales del pasado mes de junio, en 41 millones y a la UTE GEA 21 y AGG Occidental, del tramo Novelda-Montijo, de poco más de 20 kilómetros y perteneciente al tramo Badajoz-Mérida. Son ya, por tanto, 36 los kilómetros de esta línea que entran en ejecución.

En ninguna de estas dos actuaciones, como ya publicó EL PERIODICO, se incluyen las entradas a las ciudades, excluidas de las licitaciones al ser estas solo para la ejecución de las plataformas, no para el tendido de las vías; ni las nuevas estaciones, que aún están en estudio. Tampoco se incluirá la entrada a Cáceres en el siguiente tramo que está previsto sacar a licitación a principios del próximo año, el que unirá Mérida y Cáceres. Lo que por el momento Fomento no ha concretado es si el concurso de este abarcará los más de 70 kilómetros entre ambas ciudades o si también se dividirá en subtramos.

ACTUACIONES El proyecto de la línea ferroviaria de alta velocidad Madrid-Extremadura, tramo Mérida-Badajoz, subtramo Mérida-Montijo, forma parte de la línea de alta velocidad Madrid-Cáceres-Badajoz-Frontera Portuguesa, incluida en el Plan Estratégico de Infraestructuras y Transporte elaborado por Fomento para el periodo 2005/2020.

Según la información facilitada por Adif, el trazado del tramo Mérida-Montijo, de 16 kilómetros de longitud que discurren por los términos municipales de Esparragalejo, Mérida, La Garrovilla, Torremayor y Montijo, se ha diseñado, al igual que el resto de la línea, como doble vía de alta velocidad en ancho internacional para tráfico mixto de viajeros y mercancías en todo el corredor.

En su construcción destacan 14 puentes del ferrocarril sobre caminos de servicio, ríos, canales y acequias, entre los que resalta el puente sobre la carretera de La Garrovilla a la presa de Montijo, con una longitud de 100 metros. También adquieren importancia actuaciones en las estaciones de La Garrovilla y Montijo en la línea férrea convencional Ciudad Real-Mérida-Badajoz, que comprende el diseño de los nuevos edificios de viajeros y reposición de andenes y vías.

El proyecto contempla igualmente las actuaciones necesarias para la ejecución de las obras de infraestructuras tales como el movimiento de tierras, reposición de servicios y servidumbres afectadas, estructuras, construcción de conexiones transversales que aseguren la permeabilidad viaria, acondicionamiento de las obras de drenaje y cumplimiento de las condiciones de la Declaración de Impacto Ambiental.

Los principales beneficios de la construcción del tramo citado y consecuentemente de la línea ferroviaria de alta velocidad Madrid-Extremadura-Frontera Portuguesa, serán, según hizo constar Adif, un aumento del confort, al establecer unas condiciones óptimas de rodadura y trazado; aumento de la seguridad con la adopción de tecnologías punta en los sistemas de conducción automática de trenes y ausencia de pasos a nivel a todo lo largo de la línea; reducción del tiempo de viaje entre las ciudades conectadas, al permitir conexiones directas entre ellas, con un trazado de alta velocidad.