España es el país de la Unión Europea (UE) que más están abandonando los inmigrantes, según un estudio realizado por la empresa de trabajo temporal Adecco, que arroja que en el 2009 salieron del país un total de 90.000 personas, de las que la mitad pertenecían a países comunitarios.

Pese a las salidas, España sigue siendo el Estado europeo con una mayor proporción de inmigrantes sobre la población activa, con un 15,8% (3.624.000 personas), el equivalente a algo menos de 1 de cada 6 personas en actividad. Y también sigue siendo el país que más inmigrantes comunitarios recibe (48.000 en el 2009).

En total, en diciembre del 2009 vivían en la UE 17,2 millones de personas inmigrantes, lo que significa que uno de cada 14 habitantes del espacio comunitario no han nacido en él. Además, 8 de cada 10 de estos extranjeros reside en Alemania, España, Reino Unido, Francia e Italia.

En términos generales, el trabajo concluye que la crisis ha ralentizado los movimientos migratorios, porque mientras el número de extranjeros en activo creció un 10,2% en el 2008, el año pasado solo lo hizo un 2%.