La cumbre hispanolusa de Santiago de Compostela presentaba a priori un abanico de temas a tratar con escasas novedades. En realidad, tras el cambio de Gobierno en ambos países el objetivo prioritario era ratificar acuerdos de la cumbre de Figueira da Foz de noviembre del 2003, como la puesta en marcha del AVE Madrid-Lisboa en el 2010, y la creación del Mercado Ibérico de Electricidad (Mibel), puntos que quedaron confirmados ayer.

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y su homólogo portugués, Pedro Santana Lopes, destacaron que se trataba de "ratificar las magníficas relaciones" de ambos países, un objetivo que a su juicio se ha cumplido totalmente. En este sentido, ambos ejecutivos asumieron como propios los acuerdos de Figueira.

Esto supone, como explicó el propio Zapatero, que se mantienen los compromisos en cuanto a plazos y trazados para las cuatro conexiones ferroviarias de alta velocidad entre España y Portugal. De esta forma, el AVE entre Madrid y Lisboa, que pasará por las principales ciudades extremeñas, estará en marcha en el 2010 y permitirá unir Badajoz con la capital española en 1 hora y 58 minutos. Un año antes, en el 2009, estará operativa la línea entre Oporto y Vigo.

En este asunto, Carlos Floriano, presidente regional del PP, lamentó que aún no se haya aclarado el retraso en algunos tramos extremeños o se concretara nuevos datos del Madrid-Lisboa, en un momento en que se hablan de nuevos corredores.

En cuanto al mercado eléctrico, cuya puesta en marcha se fijó para abril de este año, la práctica ha demostrado que ha sido imposible su aplicación por "la necesidad de revisar sus regímenes jurídicos". Por eso, y según el nuevo acuerdo, el Mibel deberá funcionar antes del 30 de junio del 2005, con más de un año de retraso. En el nuevo documento se incluyen algunos puntos que vienen a concretar el acuerdo del año pasado, que ya preveía nuevas infraestructuras de transporte de energía en la región.

Asimismo, se mantienen los plazos previstos para la creación de la línea ferroviaria de mercancías que unirá entre el 2007 y el 2008 Madrid y Sines a través de Puertollano y Badajoz. Precisamente una de las principales novedades, según avanzó Santana Lopes, será el impulso de la cooperación hispanolusa en materia portuaria. El objetivo, indicó el dirigente luso, es mejorar tanto los flujos comerciales como en lo que se refiere al intercambio de información. Zapatero coincidió con el presidente portugués en la importancia de esta medida, que debe servir para "impulsar sinergias" e incrementar la intermodalidad en las infraestructuras.

Otra novedad es la propuesta, por parte de Portugal, de crear una red de Ciudades Fronterizas hispanolusas, iniciativa aún poco definida que se enmarca en los trabajos preparatorios del Interreg VIII. Para ello se creará una comisión de trabajo en la que participarán representantes de Extremadura, Galicia, Andalucía y Castilla y León.

El vicepresidente de la Junta de Extremadura, Ignacio Sánchez Amor, considera que es una iniciativa interesante, a falta de concretar detalles.