Expertos de Extremadura y Portugal coinciden en la necesidad de "construir un verdadero espacio sin fronteras" que sirva para mejorar la situación socioeconómica de ambas zonas y advierten de la necesidad de que el sector público mantenga, como hasta ahora, su implicación como motor del desarrollo de un espacio que presenta importantes "perspectivas de futuro". Esas son algunas de las conclusiones de la publicación La Raya Ibérica Centro-Sur , un estudio elaborado por la Fundación de las Cajas de Ahorros (Funcas) y promovido por Caja Extremadura que ayer fue presentado en Alcántara.
El informe recoge 23 trabajos elaborados por autores españoles y portugueses, la mayoría de ellos vinculados a la universidad, en los que se analizan los ámbitos geográfico, económico y social, los sectores y la estructura productiva, la cooperación transfronteriza y el apoyo estructural en el marco de la UE de los territorios a ambos lados de la frontera rayana.
El presidente de la Fundación de Cajas de Ahorros y coordinador del informe, Victorino Valle, que fue el encargado ayer en el acto de presentación de dar a conocer las conclusiones más importantes del estudio, aseguró que una de las causas del menor desarrollo relativo de La Raya Ibérica, en la zona centro-sur, estriba en la "endeblez" de su tejido empresarial. Ambas zonas presentan sistemas muy condicionados por problemas de naturaleza histórica y el informe de Funcas constata un "escaso dinamismo innovador".
DINAMICAS EMPRESARIALES En cuanto a la construcción, Valle señaló que los resultados indican que se mantiene en un ritmo aceptable, más intenso en Extremadura que en el lado portugués. Asimismo, el estudio destaca que, a pesar de que la actividad agraria sigue siendo un sector muy importante en las dos regiones, no ha sido capaz de generar, ni en el Alentejo ni en Extremadura, dinámicas empresariales que complementen sus producciones primarias.
También señaló Valle que la mayor parte de las empresas extremeñas y lusas son pymes con menos de 10 trabajadores, lo que provoca una situación de debilidad de cara al mercado exterior. Pero, además, en cuestiones laborales, el estudio indica que tanto Extremadura como el Alentejo Interior son regiones que presentan las más bajas tasas de actividad y ocupación y los más altos niveles de desempleo, a lo que se suma que el nivel de cualificación de la mano de obra es muy bajo, "lo que unido a que sus poblaciones no crecen y, en todo caso, envejecen, puede acentuar los problemas de productividad que vienen presentando".
Los resultados del informe muestran que tanto el Alentejo como Extremadura han protagonizado un importante avance en términos de nivel educativo medio de su población activa, no obstante, su fuerza laboral continúa presentando una estructura educativa desfavorable respecto a la media de sus países de origen, ya que el peso relativo de la población residente y activa que es analfabeta o sólo tiene estudios primarios es, todavía, bastante elevado.
Otro apartado destacado es el del sector servicios, que alcanza el 60% del valor añadido de la zona, aunque en el trabajo elaborado por Funcas se advierte que todavía quedan espacios muy importantes por desarrollar en este campo, con grandes posibilidades de explotación.
En cuanto a las carencias, los expertos que participan en el trabajo destacan las que se refieren a infraestructuras de transporte y comunicaciones, para lo que piden una mayor inversión.
En el acto de presentación también participaron el presidente de la Junta de Extremadu-
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