Las empresas que están aguantando la crisis son las que están exportando", reflexionaba hace unos días el gerente de una gran cooperativa extremeña, que explicaba que el estancamiento de la demanda interna está haciendo que no pocas empresas extremeñas busquen en las ventas a otros países una válvula de escape para poder sobrevivir.

Los datos sobre comercio exterior que el Ministerio de Industria, Turismo y Comercio acaba de dar a conocer confirman el creciente dinamismo de las exportaciones extremeñas. En el primer semestre del año aumentaron un 13,3%, hasta alcanzar los 652,3 millones de euros, y en junio el incremento respecto al mismo mes del año anterior fue incluso mayor, del 14,6%. De seguir este ritmo, a final de año se conseguiría sobrepasar el máximo histórico de 1.251 millones de euros exportados tanto en 2010 como en 2008.

Por otro lado, si la recuperación económica que algunos países del entorno comercial español experimentaron durante los primeros meses del año ayudó a potenciar las exportaciones extremeñas, la falta de demanda en el mercado interior está haciendo que las importaciones se mantengan prácticamente estables. Aumentaron apenas un 1,4% a lo largo de la primera mitad del año, totalizando 495,6 millones de euros, y en junio sufrieron una importante caída, del 10,1%. Así las cosas, el saldo comercial extremeño --diferencia entre las exportaciones y las importaciones-- en este primer semestre arrojó un superávit de 156,7 millones de euros, un 80% más que el que ofreció entre enero y junio del 2010.

Por provincias, la de Badajoz se mostró más dinámica, con un auge del 17,2% en sus exportaciones, mientras que en la de Cáceres las ventas al exterior tuvieron una progresión mucho más modesta, del 1,9%.

Esta mejora en las exportaciones extremeñas ha estado estrechamente vinculada al incremento de las ventas en sectores ajenos a la rama agroalimentaria, que es la que tradicionalmente ha copado --y aún lo sigue haciendo-- la mayor parte de los envíos que las empresas de la región realizan al extranjero.

De esta forma, las semimanufacturas, capítulo en el que quedarían englobados, por ejemplo, los productos del corcho, experimentaron un auge de sus ventas del 30,7% entre enero y mayo pasados respecto a los mismos cinco meses del 2010, totalizando 163,5 millones de euros, según el último Boletín de Comercio Exterior de la Junta de Extremadura. En esta misma línea, los envíos de artículos vinculados al sector del automóvil crecieron un 34,4%, hasta los 53,3 millones de euros, y las materias primas un 41,3%, hasta los 28,8 millones.

A nivel nacional, en junio las exportaciones se mantuvieron al alza por decimoséptimo mes consecutivo con tasas de dos dígitos, si bien moderaron su ritmo de crecimiento interanual hasta el 10,8% (en mayo fue del 13%). En el caso de las importaciones, su incremento se ralentizó en 2,1 puntos, hasta el 4,6%. El resultado de la evolución de ambas variables es que el déficit comercial retrocedió un 16,7% en comparación a los valores de junio del 2010. En conjunto, el primer semestre se cerró con fuertes incrementos tanto en las exportaciones como en las importaciones, del 18,5% y del 12,4%, respectivamente, mientras que el déficit comercial registró un descenso del 8,3%.

Además, si se tienen en cuenta solo los países que integran la Unión Europea, el saldo comercial registró un superávit de 1.587 millones de euros, frente al déficit de 3.512 millones del primer semestre del 2010. Asimismo, se contabilizó un saldo positivo frente a la zona euro, que alcanzó los 726 millones de euros. Por el contrario, se sigue manteniendo un saldo negativo en la balanza comercial respecto a los países no pertenecientes a la UE, que en el primer semestre fue de 25.654 millones de euros, un 12,9% de incremento en términos interanuales.