Los últimos datos ofrecidos por el Servicio Extremeño de Salud señalan que en la región se han producido un total de 81 casos de contagio del virus N1H1, todos ellos de carácter leve, si bien algunos de ellos fueron ingresados en los centros sanitarios por precaución. Las autoridades sanitarias internacionales solo consideran graves aquellos casos que necesitan ser intubados, y los que son ingresados en la UCI.

El primero de ellos se conoció el 5 de mayo. Fue un joven de 20 años de Olivenza que había viajado a México unos días. Le siguió, a principios de junio, el de un soldado de 23 años. Los demás fueron llegando con cuentagotas. Los más llamativos, por el número de contagios, fueron los 13 niños y monitores afectados en un campamento a mediados de julio en Jaraíz de la Vera. Un mes después se conoció el contagio de otro grupo de trece personas, en este caso en Cabeza del Buey.