Extremadura no ha recibido con agrado las intenciones del Gobierno central de incluir al vino en la futura ley de prevención de consumo de alcohol en menores, una medida que ha provocado el rechazo general de políticos y empresarios del sector en la región. La Junta, pese a mostrar su confianza en que Gobierno y el sector vitivinícola lleguen a un acuerdo satisfactorio para ambas partes, señaló ayer que el vino debe ser considerado como un alimento y "nunca como una bebida alcohólica más", y se reafirma en el "mantenimiento y la potenciación de un cultivo tan importante como el de la uva en la región". Los empresarios vinícolas son más contundentes y aseguran que los perjuicios económicos para la región serían "bastante cuantiosos, con un descenso importante en ventas", ya que, "si ahora lo consideran como casi un veneno bajaría el consumo del vino, que ya de por sí está cada vez peor, sobre todo entre los jóvenes".

El gerente de la Asociación de Empresas Vinícolas de Extremadura (Asevex), Jacinto Guerra, manifestó ayer a este periódico que todo el sector en la región está en contra de esta medida, y que lo que se debe hacer "es mantener lo que dice la ley del 2003, que recoge que el vino es un alimento saludable y fundamental para la dieta mediterránea". Si la futura ley no contempla esta cuestión, la repercusión "sería muy negativa para la región, y descenderían bastante las ventas".

1,5 millones de jornalesLas empresas reiteran la importancia del sector en la comunidad autónoma, con 100.000 hectáreas de cultivo --el segundo en volúmen tras el olivar-- y donde el vino da trabajo directo a mil extremeños y crea un millón y medio de jornales al año.

En cualquier caso, el Ministerio de Sanidad y Consumo matizó ayer algunos de sus planteamientos e intentó tranquilizar a los empresarios, con los que ayer mantuvo una reunión, y a los que la ministra, Elena Salgado, les anunció que habrá modificaciones en el anteproyecto de ley para no evitar la promoción del producto. Pese a todo, considera que no sería razonable excluir al vino del proyecto. El PP no comparte el argumento de Sanidad.

A este respecto, la Junta ha mostrado su "satisfacción" por los mensajes que tanto el ministerio como los representantes del sector vitivinícola lanzaron tras el encuentro.

El Gobierno extremeño, aclaró, "es consciente de los problemas que el abuso del alcohol entre los jóvenes supone en la sociedad actual", pero matizó que se trata de una situación provocada "mayoritariamente por el consumo de bebidas destiladas y no del vino, bebida que ha sido catalogada como alimento en la ley del vino e igualmente por la Organización Mundial de la Salud".

Además, reivindicó las "cualidades beneficiosas del vino, siempre que se tome con moderación", destacó las connotaciones culturales de este producto, y se reafirmó en "el mantenimiento y la potenciación de un cultivo tan importante como el de la uva en la región".