El consorcio integrado por la constructora española Fomento de Construcciones y Contratas y la italiana Impregilo ha presentado la oferta económica más baja para hacerse con el contrato de construcción y concesión del primer tramo de línea ferroviaria de Alta Velocidad (AVE) de Portugal, valorada en 1.870 millones de euros. Otros dos grupos, en los que participan ACS y Sacyr, respectivamente, compiten por este proyecto, sobre el que el día 1 se abrieron las ofertas económicas, según informó la sociedad pública ferroviaria lusa Rave en un comunicado.

El grupo formado por Brisa (participada por Abertis), ACS y Odebrecht presentó un presupuesto de 2.310 millones de euros, en tanto que el remitido por el consorcio constituido por la lusa Mota-Engil, la francesa Vinci y Somague (filial de Sacyr) se eleva a 2.198 millones.

El primer contrato del AVE luso consiste en la construcción del tramo que une la frontera española, a la altura de Caia, con Poceirao. El tramo portugués de la línea de alta velocidad Lisboa-Madrid presenta un presupuesto estimado de unos 2.400 millones de euros.