Un acto castrense sirve de despedida y honras fúnebres de los caballeros legionarios paracaidistas Germán Pérez Burgos y Stanley Angelo Mera Vera, fallecidos ayer en acto de servicio a las afueras de Bala Baluk, población cercana a la localidad de Shewand (Afganistán).La ceremonia fue presidida por el embajador de España en Afganistán, José Turpin Molina, acompañado por el teniente general Bernardo Álvarez del Manzano, jefe del mando de Operaciones. Álvarez del Manzano se desplazó ayer desde Madrid hasta Herat para hacerse cargo del traslado de los féretros hasta la capital de España.Los cadáveres de los dos soldados fueron portados a hombros por sus compañeros de la 3ª Compañía de la Bandera Roger de Flor de la Brigada Paracaidista (BRIPAC) hasta un hangar de la zona militar del aeropuerto de Herat.Posteriormente, se ofició una Misa de Corpore in Sepulto y se despidió a los soldados al son de la marcha La muerte no es el final del camino, cantada por todos los asistentes. Tras el toque de oración, las autoridades despidieron, a pie de avión, a los jóvenes que fueron trasladados en un Hércules C-130 a Manás (Kirguiztan), donde embarcarán en un Boeing 707 del Ejército del Aire que les repatriará a España.Con anterioridad a estos actos, siguiendo los deseos expresos de la familia, se hizo entrega del féretro con los restos mortales del intérprete afgano Roohulah Mosavi, para su entierro según las costumbres propias de Afganistán.