Trabajar como funcionario en Extremadura implica, a priori, cobrar menos --en algunos casos, mucho menos-- que hacerlo en la mayoría del resto de comunidades autónomas. Hasta 11.000 euros anuales menos, según las estimaciones realizadas por la Unión Sindical Obrera (USO) en un estudio comparativo.

Los sindicatos llevan varios años reclamando a las administraciones mayor equiparación salarial en este ámbito. Ven injusto que un trabajador que realiza la misma función, presta la misma dedicación y tiene las mismas responsabilidades tenga una retribución muy inferior por trabajar en Extremadura que por hacerlo en Madrid o en Cantabria.

Actualmente la función pública está dividida en cinco grupos: el A, para cargos que exigen titulación superior (licenciatura o ingeniería superior); el B, para titulación media (diplomatura o ingeniería técnica); el C, para puestos de administrativo; el D, para auxiliar administrativo; y el E, para trabajos como ordenanzas y conserjes. De acuerdo con los datos de la Unión Sindical Obrera, un empleado público del grupo A gana al año 10.000 euros menos en Extremadura que en Canarias o Baleares, y 5.000 menos que en Cataluña o Castilla y León. Si el ejemplo se traslada a un funcionario del grupo E --el grupo más bajo de la escala, donde se incluyen ordenanzas y conserjes-- las diferencias son inferiores: unos 5.000 euros menos que en el País Vasco y Baleares, los dos territorios donde más cobran.

Pero, ¿Por qué esa brecha? Según los sindicatos, las diferencias están en los suplementos --como complementos específicos, de destino o guardias--. Los salarios base son los mismos y se establecen a través de los Presupuestos Generales del Estado. Y son los Gobiernos autonómicos los que fijan las cuantías de los complementos. "Cada comunidad tiene la potestad y libertad para pagar lo que quiera", indica Guillermo Barroso, secretario del sector autonómico de la Federación de Servicios y Administraciones Públicas de CCOO de Extremadura.

CANARIAS Y BALEARES En líneas generales, las regiones más ricas son donde los funcionarios logran mejores retribuciones. Canarias aparece entre los primeros puestos porque, al igual que ocurre con Baleares, el complemento de destino es mayor que en la península por tratarse de un territorio insular. Vascos, madrileños y cántabros son los que que obtienen mayores sueldos. No obstante, en determinados grupos también aparecen regiones en teoría pobres --como Andalucía o Asturias-- en los puestos de cabeza. Por tanto, el argumento de que se paga más porque el nivel de vida es mayor queda neutralizado. "Es la excusa que nos ponen siempre; pero se paga por el trabajo realizado, no por el lugar donde se hace", lamenta Barroso.

El Gobierno central ya ha mostradosu preocupación por esta situación.De hecho, se ha constituidouna comisión en la que participanel Ministerio de Economía yHacienda, el de AdministracionesPúblicas y los ejecutivos autonómicospara estudiar los motivos de estabrecha y buscar posibles soluciones.También se ha invitado a participara los ayuntamientos a travésde la Federación Española de Municipiosy Provincias (FEMP).

Mientras tanto, los sindicatos anivel regional siguen trabajandopara mejorar las situacióneconómica de los funcionarios dela región. "Hemos solicitado la homologaciónsalarial. El objetivo es,primero, la equiparación en en lastres ramas de la función pública–Educación, Sanidad y resto– y, luego,la homologación entre regiones",explica Barroso. "La predisposiciónes buena, pero tambiénestán las limitaciones presupuestarias",agrega Ignacio Luis Cansado,responsable de política sindical dela Federación de Servicios Públicosde UGT en la región, convencido deque una de las soluciones sería extablecerunos márgenes máximosymínimos a los complementos paraque la brecha no sea tan grande.Fue precisamente este asunto elque llevó a la huelga a los funcionariosde justicia a principios de año.

Las protestas, que paralizaron casipor completo la actividad judicialen la mayor parte de las comunidades,estaban motivadas en las mayoresretribuciones que recibíanlos funcionarios de las regionesdonde las competencias en materiade justicia están traspasadas.En este sentido, destaca los funcionariosque trabajan para la AdministraciónGeneral del Estadoestán entre los peor retribuidos enlos cinco grupos de la funciónpública. "Con la transferencia decompetencias a las autonomías seestablecieron mayores salarios enlas administraciones regionales paraanimar a los funcionarios a quese fueran a ellas; pero ahora las diferenciasson muy grandes".