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España vivirá mañana un día de luto oficial en señal de duelo por la muerte del papa Juan Pablo II, según decretó el Gobierno unas horas después del deceso. El Ejecutivo socialista decidió también que, a partir de hoy, ondeen a media asta las banderas en todos los edificios públicos, los establecimientos militares y los buques de la Armada.

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, remitió a la Santa Sede un telegrama en el que expresó su "hondo pesar" y transmitió "sus más sentidas condolencias a todos los miembros de la Iglesia". La nota destacó el "compromiso inquebrantable del Pontífice con la búsqueda de la paz para el mundo y la solidaridad".

"El fallecimiento de Su Santidad representa la pérdida de una de las figuras mundiales más relevantes de la historia reciente", subrayó el telegrama. El presidente Zapatero, que encabezará la representación española en los funerales que se celebrarán en Roma, se puso en contacto, posteriormente, con el presidente de la Conferencia Episcopal, Ricardo Blázquez, para expresarle sus condolencias y las de su Gabinete.

Durante la conversación, Zapatero y Blázquez cerraron una reunión para el próximo martes, la primera que mantienen desde que el segundo fue elegido jefe de la Iglesia española.

DOLOR REAL

Los Reyes y el resto de la familia real recibieron "con profundo dolor" el fallecimiento del Papa. El Rey destacó de Juan Pablo II su "infatigable labor" a favor de la paz, la justicia y la dignidad humana, además de su "especial afecto y dedicación" hacia España. Don Juan Carlos envió un telegrama al cardenal Joseph Ratzinger, decano del Colegio Cardenalicio, en el que se mostró "hondamente apenado".

LOS PARTIDOS POLITICOS

Los diferentes partidos políticos mostraron sus condolencias por el óbito y elogiaron la figura de Karol Wojtyla. El PSOE afirmó que la muerte de Juan Pablo II supone "una gran pérdida para la comunidad internacional" y destacó la preocupación que siempre mostró el Papa por los sectores más desfavorecidos.

El Partido Popular expresó, a través de su secretario general, Angel Acebes, su "más profundo pesar" y calificó al Papa como una "figura histórica de talla universal" y un "gran referente humano". En los mismos términos se expresó el expresidente del Gobierno, José María Aznar, que destacó la fortaleza de la figura histórica de Juan Pablo II, al que recordó como un "gran luchador de las libertades" que deja un legado moral "impresionante". El líder del PP, Mariano Rajoy, subrayó que Juan Pablo II fue, durante su largo pontificado "un referente que trasciende la dimensión religiosa para ejemplificar un liderazgo moral de alcance mundial". Valoró además "sus muestras constantes de cariño a España lo que muchos españoles sientan profundamente su pérdida".

El coordinador general de IU, Gaspar Llamazares, reconoció el compromiso del Papa "en favor de los derechos humanos", tal y como hizo palpable "con sus denuncias por la guerra de Irak".

PARON VASCO

Las comunidades autónomas de Madrid, Murcia, Valencia y Baleares fueron más allá del luto oficial del lunes decretado por el Gobierno y prolongaron por tres días el duelo oficial por la muerte del papa Juan Pablo II.

Las reacciones también fueron inmediatas en el País Vasco, donde tanto el PNV, como el PP y el PSE anunciaron la suspensión de los actos de la campaña electoral durante el día de hoy.