Los pasillos del Centro de Cirugía de Mínima Invasión de Cáceres parecen los de la ONU. Es normal ver por el edificio a prestigiosos cirujanos llegados de todas partes del mundo para participar en programas de formación o investigación. Una media de 400 profesionales acuden cada año al centro cacereño para ponerse al día en las últimas técnicas en cirugía de mínima invasión, unas técnicas que consiguen reducir las complicaciones y los dolores del postoperatorio y que permiten una reducción en el tiempo de recuperación del paciente.

Cuando en el mundo comenzaba a hablarse de los denominados quirófanos inteligentes "nosotros ya los teníamos hace años", asegura el director científico del centro cacereño, Jesús Usón, cuyo tesón ha conseguido que las últimas tecnologías habiten cada rincón de un edificio ubicado en pleno campus de la universidad extremeña.

LOS INICIOS

Quizás sólo unos pocos, o sólo Usón, imaginaban cómo sería el Centro de Cirugía de Mínima Invasión cuando en 1993 presentó al presidente de la Junta de Extremadura un proyecto para su construcción. Dos años después se inauguraban unas instalaciones que, además de dar formación, ahora son utilizadas por las principales empresas fabricantes de material médico para probar sus productos antes de comercializarlos.

En la actualidad el centro cuenta con la colaboración de más de 130 especialistas de todo el mundo, posee cuatro quirófanos inteligentes que cuentan con 16 cámaras y están conectados por fibra óptica a un sistema de videoconferencia que puede controlarse desde varios puntos del edificio. Además, el centro está conectado en tiempo real con 34 hospitales de toda España --pueden participar simultáneamente hasta ocho interlocutores--, por lo que en los numerosos monitores con los que cuentan las instalaciones puede verse qué ocurre en sus salas de operaciones.

El interés que despierta a nivel mundial, la gran demanda y los nuevos campos de investigación en los que se trabaja en el centro han hecho que éste se quede pequeño, por lo que ya se proyecta crear unas nuevas instalaciones "y con una tecnología única en Europa", asegura Usón.

El nuevo centro estará listo en el 2004 y tendrá una superficie de edificación de 12.000 metros cuadrados en los que se ubicarán una residencia, un área quirúrgica, laboratorios, un plató de televisión y un helipuerto. Un proyecto de 8,4 millones de euros que lanzará a Extremadura al futuro.